El diario de Eli

Último primer día.

De nuevo a la tediosa rutina escolar, despertarme a las 4 de la mañana para tener el tiempo suficiente de arreglarme antes de que la ruta escolar llegue, 5:30 la ruta está en mi puerta para finalmente llegar a las 6 al colegio, ¡qué emoción!
Hoy es mi último primer día de escuela, último año con mis amigos de toda la vida, pero vamos, no es triste, ¡es emocionante! Será un año lleno de experiencias geniales e inolvidables, por lo menos es lo que siempre han dicho mis hermanas sobre su último año, realmente espero que sea así.
¿Qué tal si cuento un poco más acerca de mí? Es decir, puede que pierda este diario y quien lo encuentre quiera leerlo, así sabría un poco más sobre la "protagonista" y su aburrida vida personal, no se escucha tan mal, creo...
Bueno, mi nombre es Elizabeth, soy la hija menor de la familia con 15 años de edad, tengo dos hermanas mayores, Tamara de 22 años y Christina de 27, y un hermano mayor, Thomas de 17. Mis padres están juntos pero no se podría decir que están "felizmente casados" aún así, permanecen juntos. Mi mejor amiga se llama Susan y es un año mayor que yo. Siempre he sido la menor entre mis compañeros de clase, pero más madura de mente que la mayoría. Mi físico... No soy una chica atractiva, es decir, no soy deslumbrante, no soy muy delgada aunque no estoy subidita de kilos, simplemente tengo un cuerpo normal, tengo grandes ojos cafés rodeados de largas y onduladas pestañas, cabello castaño hasta las caderas, altura promedio, mejillas redondas y boca de corazón.
Ya, empecemos con los sucesos del día de hoy... Llegue al colegio acompañada de dos amigos, Lucas y Simón, han estado en mi grado desde que tengo 5 años, así que prácticamente hemos compartido todas nuestras vidas juntos, y no sólo en el salón, ya que estamos en la misma ruta, no me mal entiendan... eso es algo muy bueno, es decir, tengo 4 hombros sobre los que puedo dormir en las mañanas, ¡genial!
Mi personalidad muy agradable, así que soy fácil de socializar, debido a esto me llevo de maravilla con todos mis compañeros, eso es muy bueno, sobretodo este año.
Caminamos con los chicos por todo el colegio buscando el resto del grupo, como todos los primeros días de cada año, después de 10 minutos de búsqueda el cabello naranja escandaloso de Susi nos guió al final de nuestra búsqueda, al fin estoy con todos de nuevo, después de esas largas vacaciones estoy con mi segunda familia nuevamente...
-¡NENA! -grita Susi cuando me ve acercarme junto a los chicos- PERO QUE HERMOSA ESTÁS, CUANTO HAS CRECIDO, POR DIOS, ¡TE EXTRAÑÉ TANTO!
-Susi, baja la voz, nos vimos ayer...
-¿por qué nunca colaboras con mis escenas dramáticas?
-porque llamas la atención, no me gusta, lo sabes
-bueno, bueno. Ey, hablando en serio, estás guapa Eli, me gusta ese vestido
-gracias, es nuevo, por mi cumpleaños
-lo sé, nena; está muy cerca, ¿qué haremos?-pregunta mientras toma mi brazo para seguir nuestra charla alejadas del resto
-no lo sé, lo de siempre, ir a cenar juntas
-¿segura no quieres algo nuevo?
-no, eso está bien, en serio, sabes que me encanta la comida
-vale, sí es lo que quieres
-vamos con el resto, ya los extrañaba
-ahí viene Tobi-dice señalando con su cabeza detrás de mí
-NO PUEDE SER -volteo con la mayor velocidad que creo tener y corro al encuentro con Tobi, es el chico más cercano a mi en el instituto, el cariño que nos tenemos es indescriptible, cuando Tobi ve que corro hacia él se agacha abriendo sus brazos para luego cubrirme con ellos, Tobi da unos abrazos asombrosos, supongo que es por su gran altura- ¡NO IMAGINAS CUANTO TE EXTRAÑÉ, TONTO!
-Hola Eli, yo también te extrañé un montón, estás hermosa eh, ¿buscando conquista?
-eso te digo, guapetón
-en serio te extrañé demasiado, tonta
-yo a ti, idiota
-y... ¿Algo que deba saber sobre las vacaciones?
-no, nada emocionante o nuevo de mi parte, ¿qué hay de ti?
-pues... Conocí una chica, es nueva en mi barrio así que mis padres le dieron la típica bienvenida a su familia y después de eso seguimos en contacto
-eyyyy, eso me alegra mucho, tienes que contarme todo lo que pase entre ustedes
-apenas empezamos a conocernos, no apresures las cosas
-vale, sólo decía, gruñón

El resto del día fue exactamente igual, reencuentros, abrazos, saludos, escuchar historias y por onceava vez la rectora con su típica charla de las normas de la institución, un primer día común, nada emocionante aún...