Donde todos podemos soñar

Capítulo 2

    Mi hermano básicamente es lo contrario a mi en lo único que nos parecemos es que tenemos los dos los ojos azules y que venimos de los mismos padres porque si no sería por eso no seriamos nada. Bueno y el apellido también hace mucho, Espax. Solamente seríamos conocidos, él es el típico guaperas, popular, que cae a todo el mundo bien y yo en cambio, soy de esas que están entre libros todo el día a las que la gente no se acerca por la apariencia, la rara, la hermana del chico guapo y popular.

     Quiero hacer algo interesante con mi vida acompañada con mi mejor amiga la que ha estado en los buenos y en los malos momentos, la que ha superado conmigo todas mis caídas, la que me dice siempre que sonría aunque los días sean grises y no vea ni un rayo de sol, que tan solo sonría. ¿pero qué puedo hacer?. Quiero demostrarle al mundo que soy Amanda Jane Espax, no la hermana del chico guapo y popular o la rara. Quiero ser conocida por mi nombre no por adjetivos que lo único que hacen es clasificar a la gente. Al fin y al cabo todos somos seres humanos, todos tenemos nuestras debilidades pero también nuestras virtudes y entonces ¿qué sería del mundo si todos fuésemos iguales?

7:00 de la mañana ¡RINNN!

   ¡No puede ser, otra vez lunes! seguramente a ti también te suele pasar esto la mayoría de los lunes, no te puedes creer que ya se haya terminado el finde de semana y que otra vez tengas que volver a la rutina de todos los días. Como siempre me quedo unos minutos más en la cama y luego me levanto. Suelo dejar la ropa preparada desde el día anterior para no estar pensando por la mañana que ponerme ya que en nuestro instituto no tenemos uniforme, gracias a dios. para mi la ropa es la mejor manera en la que uno puede expresar su estado de humor. Me gusta saltarme la reglas ¿quien dijo que una camisa no se pudiera llevar con una sudadera? muchos de vosotros estaréis pensando: ¿pero esta que dice? pues así es como yo me revelo