Narra Sam
-A ver espera un momento, ¿desde cuándo tú me invitas a fiestas?- pregunte escéptica
-No veo lo extraño en que te invite a una fiesta, no es como que fuéramos enemigos jurados - dijo algo nervioso
-Pero tampoco somos amigos, si acaso solo somos compañeros de salón-
-Bueno tómalo como una invitación de compañero de salón a compañero de salón ¿iras o no?- presiono
-Ok, nos vemos más tarde- colgué la llamada
Después de un rato fui con los chicos y mi hermano a quien ya se le había pasado el enojo, me deje caer a un lado de Hector y dije feliz
-Chicos hoy tenemos una fiesta, así que señoritas pónganse hermosas-
Ellos me miraron por mi repentino anuncian y al terminar de hablar todos comenzamos a reír. Subieron las escaleras rumbo al cuarto de mi hermano para usar su ropa.
-¿Sam cuál te gusta más, la playera azul o la roja con estos pantalones negros?- dijo Joel con una toalla envuelta en la cabeza como lo tienen las chicas en el spa.
- Bueno... creo que la azul queda bien con tu tono de piel, pero la roja mmm resalta tu...- empecé a reír
-Mis hermosos ojos, mi perfecta facción, mis besarles labios- dijo mi amigo poniendo sus labios como si fuera a besar a alguien
-¡Nooo!- me moví de mi lugar pues Joel quería abrazarme – resalta tu falta de sentido común- me burle, jalando a Arturo de su brazo para cubrirme de mi amigo que no dejaba de querer besarme
-¿De quién es la fiesta Sam?- pregunto Carlos una vez listo
-Un chico de mi clase me invito al parecer no tiene una razón en si la fiesta- camine hacia él, bajamos las escaleras y fuimos a la cocina por algo de beber.
-¿Cómo va todo con los chicos que te molestan, ya te dejaron en paz?- pregunto sentándose a un lado de mí, mirándome con cariño y de manera tierna
-Pfff hasta crees- bufe – esos idiotas no se cansaran jamás, pero no me interesa lo que digan, hace mucho aprendí a no darles importancia- tome de mi vaso
-Ok, ya sabes que cualquier cosa estamos los chicos y yo para protegerte y ayudarte- me abrazo por los hombros y despeino mi cabello.
Yo solo le sonreí, Carlos siempre ha sido así conmigo después de hacernos hermanos hace tantos años me cuida y protege (no tan exagerado como Axel por suerte) cuando me intimidaron por primera vez en la escuela, fue el quien me ayudo antes que nadie.
INICIO DE FLASBLACK
Estaba en mi primer año de la secundaria, mi cabello estaba corto y tenía mi ropa de calle pues por un problema que surgió con la vendedora en cuanto a mi uniforme debía esperar algunos días más.
-Ten un bien día cariño, pasara tu hermano más tarde por ti ¿ok?- se despidió mi madre de mi antes de bajar del auto
Aunque mamá tenía mucho trabajo y había días que no estaba en la casa para nada, siempre procuro estar con nosotros el primer día de escuela, cuando pasábamos a otro grado o los días importantes, la mayoría de juntas escolares y eventos que la escuela organizara, a su manera pero nos demostraba su interés en nosotros y eso fue algo que siempre admire de ella.
-No te preocupes aquí lo esperare, ten un buen día en el hospital mamá nos vemos en la tarde- le sonreí y tome mis cosas, me beso en la frente y salí del coche, la mire irse y camine a la institución donde pasaría los no tan mejores años de mi vida.
-Buenos días chicos, me alegro de ver caras nuevas este año y espero que sus años en esta escuela sean los mejores y que dejen en ustedes una gran huella (y valla que dejo una marca en mí, que más que una huella fue una dolorosa cicatriz), ante cualquier problema nosotros le ayudaremos, no nos vean como profesores si no como nuevos amigos en quienes pueden confiar- continuo hablando el director por unos minutos más, que para mí fueron horas –sin más que decir bienvenidos a la "Secundaria Okeson"- por fin termino de hablar y todos aplaudieron, de uno en uno los grupos de alumnos presentes en la ceremonia de bienvenida fueron a sus salones de clase.
Mi grupo era el 301 al igual que Axel, Carlos y Joel cuando cursaron aquí la secundaria en su primer año, el salón no era tan grande pero era lo suficientemente amplio para albergar a 39 chicos para su primera clase de literatura en esa mañana de lunes.
-Muy bien muchachos siéntense donde gusten y atiendan a lo que les diré- dijo el profesor cuando entro al aula número 29, paso unos minutos cuando al fin dejaron de escucharse pies, voces y asientos moverse- muy bien, yo soy Jonathan su profesor de literatura, mis clases siempre estarán llenas de ruido y risas porque me gusta hacerlos sentirse bien y cómodos pero no por eso les permitiré ser flojos o irresponsables ¿ok?- dijo después de sonreírnos.
Todos contestamos en voz fuerte un "OK" y el profesor continuo
-Bien ahora por que no se presentan, empecemos contigo- señalo a una chica que se veía era alguien muy presuntuosa y antipática
- Bueno soy Viviana, me gusta leer, ir de compras, salir a pasear y todo lo que sea femenino, me gusta que llamen Vi y vivo en el centro de la cuidad- finalizo
El profesor le agradeció y continuaron presentándose los demás chicos hasta que finalmente llego mi turno
-Bueno la última persona de hasta atrás, por favor háblanos de ti y dinos ¿por qué no traes el uniforme?, si eres tan amable-
-Soy Sam, la vendedora de uniformes me dio otro uniforme que no era de mi talla y dijo que me entregaría el correcto en unos días pues estaba muy ocupada con algunos pedidos que tenía aún pendientes, pero que no le tomaría mucho así que yo creo que para el miércoles ya estará todo arreglado- el profesor me hizo un gento para que continuara – me gusta jugar videojuegos aunque no soy muy bueno, los deportes y ver la televisión, salir con mi hermano y sus amigos y estar con mi amigo Héctor, odio las cosas amargas y eso implica a las personas, las mentiras y las injusticias- termine de hablar, todos aplaudieron el Jonathan dio algunas indicaciones para la próxima clase y nos dio 25 min. De descanso antes de tener que entrar a la siguiente clase.
Salimos todos en montón del aula como si fuésemos hormigas los grupitos de amigos ya se habían formado, algunos chicos se me hacían acercado y preguntado por los videojuegos que conocía y algunas otras cosas cuando terminamos de charlar me dirigí al salón numero 60 donde me darían la clase de Matemáticas.
-Bien jóvenes soy el señor Ruiz su profesor de Matemáticas I, en un momento les pasaran unas hojas con la manera en que se llevara la clase y el reglamento interno, a continuación pasare lista para conoces quienes son mis alumnos este año.- a diferencia de nuestra anterior clase el profesor Ruiz sí que era alguien a quien no querría la mayoría, fue nombrando a cada uno de nosotros y al responder nos miraba fijamente hasta que continuaba con la siguiente persona en la lista.
-Samanta Iturbide León- dijo el
-Presente- levante mi brazo derecho y le mire, el me observo desconcertado
- Debe ser un error, Samanta Iturbide...- ajusto sus lentes y repitió pero le yo interrumpí antes de que pusiese terminar
-Soy yo profesor, yo soy Samanta- me puse de pie en mi sitio
-¿Por qué no traes tu uniforme jovencito? Y que nombre extraño para un chico, sin ofender-me observo de manera fija
-Yo... yo tuve un problema con la señorita que vende el uniforme pero solo serán por nos días, el director me dio permiso de venir así por ahora y.... emm... no soy un chico soy una chica señor- respondí algo apenada
Toda la clase se sorprendió y me miraron al mismo tiempo que comenzaban los susurros entre todos y los cuchicheos
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Tomboy ¿y un chico ?
RandomEl amor no siempre aparece de la imagen, ropa y figura como tu pensabas pero cuando descubres la verdadera belleza de esaa persona perfecta para ti olvidas los comentarios externos. (No es una historia de amor entre chicos aclaro)