¿No te pasa que cada vez que ves a esos familiares lejanos te dicen "¡Ey!¡Qué grande estás!"? Ellos son los que más notan tu diferencia al crecer, notan cuánto cambiaste a lo largo de esos años.
Cuando uno es mayor, ya no le gusta cumplir años...
¿Por qué? Es un lindo día. Porque saben que cada vez están más cerca de la muerte, ese miedo que los asecha constantemente. Los últimos momentos de vida son muy duros, para cualquiera.
Lo mejor que le puede pasar a alguien es morir felíz, sabiendo que las personas que te aman, te seguirán amando, vivo o muerto.
Luego pasás al otro mundo y pensás en todas esas veces que te sentiste mal, lloraste o pensaste que tu vida se acababa ahí.
Esos terribles momentos en los que tuviste que soportar alguna que otra burla, o alguna contestación que te tuviste que tragar gracias a esas putas contestaciones de los demás.
Pero despues de todo, la vida es buena, ¿no? La vida es corta y hay que aprovecharla como si todos los días fueran el último.
