Una semana antes.
-Louis, tenemos que hablar...por favor solo escúchame.
-Tú y yo no tenemos nada que hablar, así que por favor déjame en paz.
-¿Enserio eso quieres?
Me quede callado por una milésima de segundo ¿En verdad eso quiero? ¿En verdad me quiero alejar de él?
-Estoy seguro de que no quieres alejarte de mí, porque tú me quieres Louis...
-¡Ese es el maldito problema Harry! Yo te quiero, pero siempre soy el que sale perdiendo en todo, ya no pienso salir herido por tus estúpidas mierdas.- me sentía mal hablarle de esta manera, pero me prometí a mí mismo que ya no iba a dejarme llevar por mis sentimientos. Harry cerró los ojos, sabía que le dolió lo que había dicho pero tenía que mantenerme firme.
-Yo sé que todo lo que ha pasado entre nosotros tiene una solución, solo son pruebas para ver si nuestro amor es fuerte realmente, sé que esto si vale la pena Lou, dame una oportunidad, prometo no volverte hacerte daño... - Harry se acerca a mí y acerca sus manos a las mías. Siento una chispa al tocar su piel junto a la mía. Harry ¿Qué estás haciendo conmigo?
Lo miro a los ojos y el hace la misma acción, siento el impulso de besarlo para poder sentir sus labios contra los míos. La única forma de mostrarle que le quiero.
-Lou...
-Harry...
-Bésame - dice y siento eso que no puedo explicar cuando estoy con él. Miro sus labios son carnosos y delgados. Pasa su lengua sobre ellos. –hazlo, lo deseas tanto como yo.
-Eres un idiota –digo y finalmente me animo a besarlo, junto mis labios con los de Harry.
Lo beso tiernamente pero siento que eso no es suficiente. Me atrevo a besarlo apresuradamente y noto que lo he tomado de sorpresa. Sonrío para mis adentros. Nos besamos como si nuestras vidas dependieran de esto. Muerde mi labio y eso hace que la piel se me erice. Me toma de la cintura y me pega hacia la puerta. La distancia que se presentaba entre nosotros se ha esfumado. Agarro su cabeza y lo junto más hacia mí, intenta meter su lengua a mi cavidad bucal y se lo permito, estoy seguro de que mi boca sabe asquerosamente por esa hamburguesa que acabo de comer, pero veo que Harry no lo nota. Empieza a hacer movimientos circulares dentro de mi boca. Se separa de mí y empieza a besarme el cuello, muevo mi cabeza hacia atrás como auto reflejo. Mi control se puede ir despidiendo de mí.
-Detén... ¡Oh dios! - no termino de decir mi frase, cuando noto que Harry me esta succionando el cuello ¿Me está haciendo un chupetón?
Exalta su vista y me observa confundido - ¿Qué pasa? -pregunta.
-Esto ya es suficiente.
-Tienes razón. Lo siento si te incomode.
-No fue eso -me ruborizo- Solo que este lugar no creo que sea el apropiado.
-La princesa quería algo más romántico -Dice en tono de burla. Pongo los ojos en blanco por su comentario.
-¿¡Crees que la bodega del conserje el algo romántico!? -digo irritado en tono de sarcasmo.
-Tienes razón.
-Otra vez.
-Sí, otra vez imbécil.-No evito poder sonreír.
-Hazz, ya no quiero que nada nos separe.
-Lo mismo pienso. Solo quiero decirte que si algo malo vuelve a pasar entre nosotros quiero que tengas presente que te quiero mucho, que eres alguien especial en mi vida y no me arrepiento de haberte conocido. -dice serio pero sé que me está hablando sinceramente.
