Capítulo III

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Todo fue de mal en peor después de la pequeña pelea.
Primero Tyler y Pearl fueron a la cabaña de Apolo, pero la chica llamada Willa no estaba, aun así otros chicos de la misma cabaña los ayudaron, Pearl se había fracturado la muñeca, al parecer no sabía dar un golpe. Un chico vendó la mano de Pearl y luego limpio las heridas que Tyler tenía en el labio.

-Coman esto –dijo el chico ofreciendo unos pequeños cubitos cafés –los dolores pasaran en unos minutos y puede que tu mano este sana mañana.

Luego de eso, fueron a ver a Quirón para informarles del comportamiento de Clark. Maldición, pensó Tyler, como odiaba a ese tipo. Pero Quirón estaba ocupado, al parecer un campista había regresado de una misión, Tyler solo pudo un chico más o menos de su edad solo que un poco más esbelto, de cabello rubio sentado en un sillón.
Cuando salieron de la casa ninguno dijo nada, pero Pearl rompió el silencio.

-Tyler –dijo Pearl –yo me iré a mi cabaña, nos vemos en la cena
-¿Tan temprano? –Preguntó Tyler – ¿pasa algo?

Pearl bajó la vista hacia sus zapatillas

-No pasa nada, solo quiero despejar mi mente, después de lo que paso con Clark...
-Si... te entiendo –la interrumpió Tyler y bajó la cabeza

Luego ambos guardaron silencio y fue Pearl quien hablo nuevamente

-Cuídate quieres
-Está bien Pearl –le dijo Tyler –nos vemos

Vio que Pearl se alejaba y él se quedó parado fuera de la casa azul.
Su estómago y su labio ya no dolían tanto, así que Tyler decidió salir a caminar para despejar la mente, miro a su alrededor para asegurarse de que nadie estuviera viéndolo y camino hacia el bosque.
Mientras caminaba, recordó todo por lo que había pasado.
Fue fácil dejar su hogar, su madre ya no era la misma, lo regañaba por todo, nada de lo que él hacia parecía bueno para su madre, él ya no se sentía ese lugar como un hogar, pero si sentía un hogar en el campamento, ahí la gente si se preocupada de él. Tenía a Pearl, que a pesar de conocerla hace unos días, la veía como una hermana.
Recordó a Zeus, que le mostro el camino, bueno le envió las visiones del camino, Zeus nunca se mostró, solo esa noche en su habitación cuando le dijo que debía irse, luego todo fue un caos, perros del infierno y mujeres dragón, Tyler no sabía si ellas tenían un nombre, y ese maldito Ciclope que lo hizo gastar hasta sus últimas energías.
Llego a una parte del bosque en donde había unas rocas apiladas, se sentó y recostó su espalda contra las rocas. Hubiera deseado tener sus audífonos y poder escuchar algunas canciones de Green Day, pero al salir de casa no había llevado nada más que una botella de agua ropa interior y dinero, del cual aún le quedaba un poco.
Estaba tan tranquilo y calmado que en un par de minutos Tyler se durmió.En su sueño estaba nuevamente en su habitación, minutos antes de que Zeus apareciera, se quedó mirando la puerta esperando a Zeus, pero no fue el quien entro, en su lugar apareció un hombre de mediana edad, con el cabello castaño y un poco más esbelto que Zeus.

-¿Quién eres? –pregunto Tyler
-Eso no importa –dijo el hombre –no hay mucho tiempo, así que seré breve. Tienes que ayudarme Tyler, tú y tus amigas, mi hijo perderá la vida si no llegan, además horribles cosas pasaran
-¿Qué? –Tyler estaba confundido
-Solo vengan al museo, por cierto, el tercero está por llegar, despierta Tyler –luego gritó –despierta...
Tyler abrió los ojos y se sentó de golpe. Solo fue un mal sueño pensó.
Pero antes de que se pudiera ponerse de pie escucho un grito y cayó al suelo, intento ponerse de pie pero fue inútil, había alguien sobre él, cuando noto que era una persona la tiro a un lado y se levantó.
Era una chica, unos centímetros más baja que él, y mucho más delgada, yacía inmóvil en el suelo y Tyler entro en pánico ¿Estaría muerta? Tyler salto a su lado, y la volteó, aun respiraba, la tomó en sus brazos y comenzó a caminar en dirección al campamento, la chica no pesaba mucho y Tyler tenía fuertes brazos por lo que no costó mucho llevarla.
Antes de llegar al campamento pidió ayuda.

-¡Ayuda! –grito

Algunos de los campistas que estaban cerca llegaron y tomaron a la chica, luego Tyler escucho que alguien gritaba.

-Traigan a alguien de la cabaña de Apolo, rápido

Luego llegaron dos chicos con camillas y una chica que parecía mayor que los otros, ella tomo la mano de la chica inconsciente. Al hacer contacto su cara palideció, como si hubiera visto un fantasma.

-Viaje por las sombras –murmuro
-¿Qué? –preguntó Tyler
-Nada –respondió la chica –llévenla a la Casa Azul, ahora

A la orden de la chica, los ayudantes se fueron a toda prisa y ella los siguió.
Tyler sintió que alguien se ganaba a su lado, era Pearl y estaba toda empapada.
-¿Qué pasa? –preguntó
-Apareció esa chica en el bosque y la he traído
-¿Qué? ¿Tú solo?
-Sí, apareció de la nada, como... como si se hubiera teletransportado

Pearl lo miro con expresión monótona

-Sé que suela loco –comenzó Tyler –pero yo estaba sentado y luego cayó encima de mí-Eso sí que es raro
-Ya lo creo –Tyler hizo una pausa -¿Por qué estas mojada?
-Oh -dijo Pearl –solo fui a nadar, no sé, de pronto se me vino la gana
-Ah...
-¿No quieres saber que le paso a la chica?
-¿Qué? –Tyler la miro sorprendido
-¿No quieres saber que le paso? ¿Cómo llego? Porque yo sí, ven vamos a ver

Pearl comenzó a caminar.

-Pearl espera –dijo Tyler tomando el brazo de la chica
-¿Por qué? Pearl lo miro a los ojos, Tyler pudo ver que sus ojos eran verdes como el mar
-No lo sé, solo, no sé, tal vez esto no es de nuestra incumbencia
-Pero tú la trajiste, deberás contarle a Quirón lo que paso
-En eso tienes razón –Tyler se calló –pero primero, hay algo que debes saber

Tyler llevo a Pearl hacia un lado y luego le conto su sueño
Se sintió como un tonto, de seguro Pearl creía que era una especia de broma, pero cuando termino de hablar su cara era de espanto.

-¿Qué? ¿Qué tienes? –preguntó Tyler

Pearl no hablo

-Pearl ¿Qué te pasa? Dime algo
-Es –la voz de Pearl temblaba –yo también eh tenido sueños extraños, donde estoy en un lugar oscuro, como una cueva, pero no puedo ver nada, solo escucho hablar una mujer.
-Creo que debemos hablar con Quirón
-¿Qué? –Dijo Pearl -¿Estás loco?
-Solo él nos puede ayudar

Pearl guardo silencio y se quedó mirando la cara de Tyler. Su cara expresaba temor y angustia.
Tyler le dio un abrazo.

-No te preocupes –le susurro al odio –Todo irá bien
-Bueno –dijo Pearl asintiendo –vamos donde Quirón

Se soltaron y se fueron caminando en silencio.
Cuando llegaron a la casa azul la puerta estaba abierta, pero antes de entrar echaron un vistazo, parecía no haber nadie así que Tyler habló.

-¿Quirón? –preguntó

Después de unos segundos de silencio vieron aparecer la silla de ruedas, la cara de Quirón era monótona, como si su cuerpo estuviera presente, pero su mente en una galaxia muy muy lejana.
-¿Qué pasa? –preguntó Quirón cuando estuvo frente a ellos

Tyler y Pearl se miraron

-Hay...-dijeron ambos al unísono
-Hay algo que debes saber Quirón –dijo Tyler
-Bueno díganme –dijo Quirón

Primero Pearl conto todo lo que había soñado.
Después fue el turno de Tyler
Si la cara de Quirón era monótona, ahora no se podía adivinar qué era lo que realmente sentía, si era miedo, preocupación o furia. Esos solo logro que Tyler se sintió más temeroso.
Fijo su mirada en Pearl y esta se apretaba las manos con nerviosismo.

-Sera mejor que vengan con migo –dijo Quirón

Perl y Tyler comenzaron a caminar detrás de Quirón en silencio, lo único que se escuchaba era el sonido de la silla de ruedas.
Llegaron a una pieza y Quirón abrió la puerta. Dentro de la habitación habían tres personas, una chica rubia, que Tyler a reconoció como la campista que ayudo a la chica del bosque, en la cama estaba la chica, aun inconsciente, y de pie apoyado en la pared un chico de cabello rubio con ojos grises, el chico que estuvo con Quirón esta mañana, pensó Tyler. Ninguno decía nada.

-Willa, necesito que nos dejes solos, yo me encargo de ella ahora

Willa miro a Quirón y luego al chico rubio

-Claro, ya le di un poco de ambrosia, y cure sus heridas, debería despertar pronto –la chica camino a la salida –Hola Pearl –saludo
-Hola –respondió esta

Cuando Willa salió cerró la puerta tras ella.

-Yo también debería irme Quirón –dijo el chico rubio
-No, Albert tal vez necesitemos tu ayuda
-Está bien le respondió el chico –luego camino hacia Tyler –así que tú eres el Hijo de Zeus y tú la Hija de Poseidón, un gusto conocerlos a ambos, soy Albert Chase Hijo de Atenea
-Un gusto –dijo Tyler
-Igualmente –murmuro Pearl
-Bueno –intervino Quirón –es hora de hablar de la misión que deben llevar a cabo con la Hija de Hades. 

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⏰ Última actualización: Jun 19, 2016 ⏰

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