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Ya había pasado un poco más de un mes desde que Kelly se había ido a Canada

Hood la estaba pasando de maravilla, se sentía renovada al 100%. Su prima Jenedith vivía en las afueras de Vancouver en una enorme y lujosa casa la cual estaba ubicada prácticamente en un bosque, los vecinos más cercanos estaban a kilómetros por lo que todo era muy tranquilo

Kelly de verdad sentía que estaba en otro mundo, estuvo desconectada totalmente de sus redes sociales, no tweeteaba nada ni menos subía fotos a Instagram. La primera que subió fue la que anunciaba que en un mes nacía su hija lo que también se podía entender que ya hacía un mes que estaba en Canadá, pero después de contestar algunos comentarios volvió a no abrir nunca más la app

Se sentía libre y bien consigo misma y su decisión. Su prima tenía demasiado dinero, sus padres eran dueños de incontables empresas exitosas por lo que aprovechaba de varios lujos que hacían su estadía una perfecta. Tenían un gimnasio, un sauna y propios chefs. Esa casa parecía un maldito hotel de 5 estrellas sin contar que todo era mejor ya que su prima era muy dulce y comprensiva. Ambas se querían muchísimo

Por lo que estos meses para Kelly fueron de verdad sanadores

Pero se olvidaba de una cosa. El padre de su hija

Cameron nunca más había hablado con Kelly y no porque no quería, en realidad estaba desesperado por comunicarse, ya le había dejado incontable mensajes de texto y de voz disculpándose y pidiéndole que volviera. Le mandaba tweets, mensajes directos, le comentaba las fotos. Hacía de todo pero no podía comunicarse, parecía algo imposible

Estaba desesperado, no sabía cuando volvería y sabía que está distancia que estaba tomando hacía el era mala. Tenía miedo que le quitara a su hija por decisión propia y que nunca volviera a Nueva York ya que nunca aclaró su fecha de regreso ni siquiera a sus amigos más cercanos con los que claro Dallas siempre andaba en contacto para nuevas noticias que nunca tenían

Ella con los únicos que a veces hablaba era con Shawn, Jack J, a veces Nash y Matthew. Nadie más, ni siquiera Claire, muchas veces quiso hablar con ella pero luego se arrepentía

••••

Kelly estaba sentada en una hamaca paraguaya que estaba enganchada en el patio de la casa de su prima a dos arboles. Mientras leía el libro "Orgullo y Prejuicio" que había empezado al inicio de este viaje, se hamacaba ligeramente y sentía muy en paz, estas cosas no se podían hacer en Nueva York

Jen se acercó lentamente a ella y una vez que llegó se colocó en frente de Kelly tapándole la luz del día

-No me dejas leer- Le contesto con una risa mientras aún miraba su libro. Cuando no obtuvo respuesta levantó su vista y vio a su prima con los brazos cruzados y muy seria

-Cuando pensas volver?- 

Kelly se sorprendió por la pregunta -Auch, me estas corriendo?- Se rió incómodamente mientras mordía un pedazo de frutilla y cerraba su libro

-Nonono pero... Eso ya va a explotar- Se sentó a su par y toco la panza de su prima. Kelly la miro confundida no entendía a qué quería llegar -El padre... El tiene que estar en el nacimiento, opino que te vayas ya- Jenn le hizo seña a uno de los tantos sirvientes que tenía y le pidió algo de alcohol. Esto era un tema delicado así que necesitaba refuerzos

-Falta todavía- Dijo Kelly como si ni le importara el tema y siguió comiendo

Jen la miró un tanto ofendida -Acaso vos queres que tu bebé nazca acá?- Estaba confundida

-No sería tan malo- Contestó Hood y se apoyó en su prima para poder pararse de la hamaca

Jen también lo hizo -Avísame así le avise a Cameron entonces que venga-

Instagram~Cameron DallasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora