Desearía volver a verla, pero su muerte me ha arrebatado esa posibilidad, últimamente he adquirido esta costumbre de escribir a las personas que ya han fallecido, sé que nunca leerá lo que escribo pero por lo menos me sirve para practicar un poco. Quisiera que supiera que usted cambio mi vida, usted ha cambiado mi manera de pensar, me transmitió conocimientos que mis otros profesores no pudieron, usted me transmitió esa pasión que tenía por enseñar, muy pocos tienen esa habilidad. Usted me hizo entender cosas que llevaba años sin hacerlo, no se imagina lo que sus clases hicieron conmigo, mi pasión por los idiomas despertó gracias a usted, ahora se lo que quiero estudiar de verdad.
Me entristecí al entrarme de su muerte, aunque sé que aveces no me lo tomo de la mejor manera, siempre voy a estar agradecida pero voy a lamentar nunca a verlo dicho en persona.
Ahora usted es parte del universo, y espero que su espíritu este en todo lo alto, porque usted era una de las mejores personas que he conocido.
Con todo mi cariño.
Stephanie Flores
