Oscuridad

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Ninguna persona que no haya pasado por un centro de rehabilitación sabe realmente como es. Yo tuve la mala suerte de conocerlo y sé que hoy en día aunque me pagaran millones de dólares no volvería a ese sitio tan negro. Como dije en el anterior capítulo mis primeros 5 días dentro de ese sitio fueron los peores , me sentía presa ante la mirada de todas esas chicas en mí misma situación , me sentía cada día más débil porque no veía ningún rumbo bueno y sobre todo no tenía ganas de vivir , es triste pero es la realidad. Mi habitación era un rectángulo con una ventana y dos camas que estaba compartido con una chica llamada Lucia que recuerdo que estaba en una situación bastante parecida a la mía. Con el correr de los días nos hicimos muy buenas amigas , ella me contaba cual eran sus sueños antes de entrar a ese lugar tan feo y lo que iba a hacer si salía , nos pasábamos las horas contándonos anécdotas de pequeñas y hablábamos de cómo que habíamos terminado así. A pesar de tanta oscuridad que había en mi cuerpo ella aportaba una luz pequeña que me hacía por minutos estar feliz. Solo teníamos un día de la semana para que nuestra familia nos pudiera venir a ver y mi día era el miércoles . Cada miércoles los veía a mis padres , sus ojos llenos de lágrimas y lamentándose por dentro por no haberse dado cuenta de esto antes. Me traían cajas llenas de fotos , recuerdos , y cartas escritas por ellos que me devolvían la ilusión por vivir. Es tan duro ver solo a tu familia un día a la semana ... ¿ Podríais vosotros ? en fin , para mí era casi imposible.

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⏰ Última actualización: Jan 24, 2016 ⏰

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