Volvía de la escuela, otra vez más.
Mi habitación, cuatro paredes formando un cubo y aún así seguía Legs molestándome.
Sobre las colchas de mi cama había una nota.
"Hoy hablaste conmigo Skinny Legs, pero tranquila... Mande a muchas personas para que hablen contigo" —Legs
Legs tenía razón... Había hablado con más de 30 personas que ni conocía y la mayoría era solo para decir "Permiso"
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Skinny Legs
Short StorySkinny Legs, como la apoda el autor de las cartas que le llegan a la chica cuyas piernas son como las de un flamenco. Camile, Skinny Legs, Sufre de anorexia aunque trata de ocultarlo con remeras grandes y pantalones sueltos, nunca una remera ajusta...
