Algo sorpresivamente nuevo

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Palabras de la autora: Estoy muy emocionada y a la vez muy nerviosa de compartir mi fic. Primero porque empieza medio fuerte, un poco de nsfw, que algunos en el fandom lo consideran una aberración por el hecho de que es un show infantil. Lo segundo es porque no me considero una buena escritora y creo que me falta mucho que aprender, pero aún así, espero que les guste.  


Habían esperado tanto tiempo para esto. Pasaron meses que no se veían, no tenían tiempo libre para pasar el rato juntas. Se extrañaban tanto. Blue Diamond le plantó un millón de besos en el cuello a su, ahora oficialmente, novia. Esta suspiró con deseo, cerrando los ojos y echando la cabeza hacia atrás.

"Te eché de menos" le besó las clavículas.

Yellow Diamond no le respondió, estaba muy ocupada gozando de las caricias y besos que su pareja le proporcionaba. Ya podía sentir un pequeño cosquilleo en sus partes bajas que le pedían más. Blue ahora besaba su vientre. Yellow se sentía amada.

La azul extendió dos de sus dedos, acercándolos a la boca de Yellow, la cual con gusto los chupo y lamió, haciendo que la otra comenzara a sentir que se quemaba por dentro. Retiró súbitamente los dedos y bruscamente los introdujo en la vagina de la rubia. Yellow soltó un fuerte alarido ante la repentina acción. Vagamente comenzó a introducirlos y sacarlos repetidamente, adquiriendo velocidad de a poco. La amarilla por inercia estiro sus larga y enormes piernas, también estirando sus deditos. Estaba alcanzando su limité muy rápido, era muy sensible ante cualquier contacto. Se mordió el labio inferior. 

Yellow se abrazó a su novia, acercándola, besando su cuello mientras Blue entraba y salía de ella. La azul se lanzó sobre ella, retirando sus dedos y chocando sus intimidades. Comenzaron con ese ritual tan común entre ellas, las tijeras.

A pesar de que era una cosa que hacían con frecuencia, Yellow lo disfrutaba como si fuera su primera vez. Pero hoy, Blue estaba sobre excitada, no tenía idea de por qué, literalmente estaba ardiendo. De pronto, comenzó a sentir una especie de contracción, algo estaba creciendo y saliendo de su entrada. Era algo gomoso, húmedo y escurridizo. Era un tentáculo. 

Este comenzó a hacer presión contra los genitales de Yellow Diamond, introduciéndose desesperadamente en la entrada de la amarilla.

La rubia dio un fuerte grito y abrió sus ojos de par en par, sea lo que sea que Blue había hecho, le había dolido mucho y la hizo entrar repentinamente en pánico.La azul no podía soportar la gran cantidad de placer  al sentir como su tentáculo era presionado por las hirvientes paredes internas de Yellow.

Por instinto, empezó a penetrarla, con ritmo. Yellow aullaba de dolor, pero poco a poco sus gritos se convirtieron en ruidosos gemidos. Blue tomó eso como una invitación a embestir con fuerza. Ambas estaban gimiendo freneticamente, respirando costosamente.

Blue volvió a plantar miles de besos por todo el cuello y pecho de su novia. La fricción las acercaba cada vez más y más a su límite.  Sus cuerpos temblaban y sentían como sus músculos se contraían. Yellow llegó al orgasmo, pero Blue no, levantó una de las piernas de la amarilla, enganchándola en su hombro para penetrar con mayor profundidad, haciendo llorar a su novia, era demasiado para ella. Volvieron a tener otro orgasmo, y Blue llenó por completo la entrada de Yellow con un líquido espeso y caliente.

Lentamente, la azul retiró el tentáculo, el cual cansado volvió a introducirse en la cavidad de la cual salió. Yellow estaba agotadísima. Daba grandes bocanadas. Blue besó su frente y se levantó a seguir haciendo sus mandados, mientras la otra descansaba.

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