Lydia y su mundo rosado
Lydia Fresa se encontraba en su castillo de paletas junto a su príncipe Stiles Gomita. Ella estaba muy emocionada, ya que iba a visitar esa tarde a sus mejores amigos.
Fue con su unicornio hacia el castillo de Scott Canela, donde se encontraban todos reunidos. Al llegar notó que estaban Kira Caramelo, Malia Malvavisco, Liam Azúcar, Mason Chocolate y, obviamente, Scott Canela.
Todos la miraban con una expresión de tristeza, como siempre. Lydia solía ignorarlo, pero esta vez decidio preguntarles que había sucedido, pero no obtuvo respuesta alguna.
Ya un poco molesta y angustiada se fue hacia su castillo con la idea en mente de quedarse viendo la tele de hamburguesa con su Stiles Gomita, pero él no estaba.
Había desaparecido.
Un poco preocupada empezó a buscarlo en su jardín de algodón de azúcar. No lo había encontrado. Observo detalladamente un arbusto de algodón de azúcar y encontró una nota: "Me voy y no volveré, descubrí la verdad".
Ella no entendía lo que estaba pasando, primero sus amigos y luego su Stiles. No comprendía por qué razón estaba sucediendo aquello.
Lydia se fue del castillo a buscar ayuda, cuando salió de dicho lugar no había nadie, ninguna persona.
Su mundo rosa se comenzó a tornar gris, empezando por los techos de las casitas de caramelo hasta llegar al dulce suelo.
Ella gritaba en busca de ayuda, pero las palabras no salían, se quedaban atascadas en su garganta. Asustada llamó a Scott con su celular de pudin, cuando este contestó solo se escuchaba un llanto.
Lydia despertó en su cama. Había sido todo una pesadilla.
A su lado estaba Stiles Gomita viendo en la tele de hamburguesa un reportaje sobre un suicidio, él estaba llorando. No entendía el porqué.
– ¿Por qué estás llorando Stiles? –Le preguntó Lydia un tanto confundida–.
– E-Esa chica... Yo la conocía, Lydia. –Dijo en un susurro–.
– Lo siento...
Un poco triste por él se fue hacia la cocina a preparar algo de comer, iba a preparar salchipapa, la comida favorita de Stiles Gomita. Al darse cuenta de que no había papas salió del castillo directo al mercado para poder comprarlas.
Al salir de allí notó que algo estaba mal, las personas movían sus labios pero no emitían sonido alguno, era como si no pudieran hablar.
Se sintió como en aquel sueño en el cual no podía gritar ¿Y si no había sido un sueño? ¿Y si había pasado realmente?
Lydia se llenó de preguntas al instante, decidió no pensar más en eso y concentrarse en buscar las papas. Paso por el bosque rosado, cogió algunas paletas para el postre y retomó el camino a casa.
Cuando llegó a su destino se dio cuenta de que Stiles Gomita seguía viendo el mismo reportaje del suicidio, ahora pasaban fotos de la chica fallecida.
Se me hace algo familiar –Pensó Lydia.
No quería tocar el tema, así que procedió a cocinar la comida favorita de su príncipe, estaba muy preocupada por él. Nunca lo había visto así.
Quiso preguntarle de dónde la conocía, cuándo la conoció, y muchas otras cosas, pero él evadía el tema y le respondía diciendo "Lydia, es mejor que no lo sepas".
Eso la enojaba, Lydia quería saber de quién se trataba. Curiosa, buscó en su computadora de alfajor fotos sobre esta chica. No lo entendía, sentía que la conocía de algún lado. Pero no sabía quién era.
Ya cansada por todo lo sucedido aquel día se encaminó a su cuarto. Pasó por un pasillo de paleta adornado con cuadros rosas y distintas esculturas de caramelo.
Un espejo reposaba en el final del pasillo, ella nunca se había visto en uno, y tampoco recordaba tener un espejo en su casa.
Lydia se paro delante del cuadrado de vidrio y observo su imagen aturdida. Lo que había visto la hizo arrepentirse de verse al espejo.
–¿Estoy muerta?– Se preguntó
Rápidamente fue hacia su televisión a ver si las noticias seguían hablando sobre el suicidio, Stiles apareció dentro de la habitación en la que se encontraba la televisión de hamburguesa.
– Por favor, no prendas la tele –Ella no lo escuchaba, quería saber la verdad– ¡No lo hagas Lydia!
Tomó el control remoto y encendió la televisión, colocó el canal de noticias mientras ignoraba los gritos de súplica de su querido príncipe.
"Se llamaba Lydia Martin, dicen que se suicido por acoso escolar"
Tras escuchar eso cayó al piso de rodillas y comenzó a llorar.
Había recordado todo.
Ella era Lydia Martin.
Su mundo rosado era falso. Nada era real. Sus "amigos" Scott, Malia, Kira, Liam y Mason eran en realidad sus agresores. Gracias a ellos murió.
No podía creerlo. Estaba atrapada en un mundo que no tenía fin, en donde las personas que causaron su muerte eran sus amigos, en donde el rosa era el único color que existía.
A estas instancias Lydia hubiera preferido que su mundo fuera gris, como en su sueño. Porque soñar era la única forma que le quedaba para escapar de la realidad.
Fin.
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Lydia y su mundo rosado. (Teen Wolf Awards)
Science FictionDescubre lo trágico que puede ser vivir en un mundo rosado. Mi one shot participa en el concurso "Teen Wolf Awards" del equipo Multifandom Awards