Parte uno y único

15 4 0
                                    


Miraba la vida pasar, se sentaba en el banco de siempre con la música y sus amados libros.

De tanto en tanto, caminaba hacia otra zona del parque, pero regresaba a su asiento.

Al pasar la tarde, llegaba a su casa, su pequeño pero hermoso hogar donde era completamente feliz. Luego de cenar se acostaba pensando que a la tarde siguiente retornaría a su sitio, porque después de tantos años, ya lo sentía suyo. Era parte de su vida no podía dejar de ir, sabía que todo podía suceder.

A la mañana siguiente despertaba de buen humor con muchas ganas de ir a su ocupación, donde ella disfrutaba, estaba muy contenta.

Terminaba la gran jornada laboral y se iba a su lugar. Cuando se sentaba, leía y escuchaba música observaba a la gente transcurrir, pensaba muchas cosas, entre otras, si ellos serían realmente felices y si ella lo era. Estas y muchas cuestiones pasaban por su cabeza. Hasta que él se sentó en ese lugar querido.

Pasó mucho tiempo, pero seguía yendo a su espacio soñado, pero esta vez no estaba sola; se oía un abue contame otra vez esa historia de cómo conociste al abuelo. Sí, en ese mismo parque, ese mismo banco, donde todo comenzó de una manera muy especial. 

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jan 28, 2016 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

La ocasión Donde viven las historias. Descúbrelo ahora