El encuentro

524 24 6
                                    

LLUVIA DE VERANO

CAPÍTULO 1: El Encuentro.

Alberto Garzón se puso su americana y colocó el pin del triángulo rojo en la solapa. Sintió los nervios recorrer su cuerpo desde la nuca, pasando por la columna vertebral y llegando a los tobillos.

Nunca pensó que llegaría ese día, el día en el que se presentaría a la investidura como presidente de España. Había costado mucho, un reclamo de ley electoral, un recuento de votos para lograr más escaños, e incluso había costado un pacto con Podemos. Un pacto que muchos querían y otros odiaban, pero que según el criterio de los españoles, era el pacto que necesitaba el país. También había costado varias discusiones con Pablo Iglesias para ver quién sería presidente, pero finalmente se decantaron por Garzón, ya que daba una imagen más fresca y juvenil.

Lo más curioso es que el pacto se había llevado a cabo por separado. Solo se reunió una vez Garzón con Pablo para firmar ciertos documentos, pero Alberto no había conocido al resto de diputados aún.

Sin embargo, sabía los nombres. Sabía que tendría que volver a verle, y no estaba seguro de si quería que eso pasase.

Se giró mientras Sol Sánchez le recolocaba el pelo hacia un lado y la camisa correctamente.

-Está genial, presidente.-le dijo la mujer sonriendo.

-Eso espero. Estoy muy nervioso.

-Todo saldrá bien, tranquilo.

Pasaron los minutos mientras entraban los diputados al Congreso. De lejos vio a varios de los diputados que ya conocía: Carolina Bescansa, Alberto Rodríguez, evidentemente Pablo...y también al que no sabía si quería ver. El chico le miró, clavó sus ojos azules en su mirada y sonrió.

A continuación entraron los 18 diputados que había conseguido su partido tras reformar la ley electoral, siendo él el último. Ocupó su escaño mientras charlaba con sus compañeros, hasta que le tocó salir a presentar su investidura. Todo fue sobre ruedas. Consiguieron mayoría absoluta gracias a las confluencias y Alberto Garzón fue nombrado presidente.

Luego debatieron algunas reformas y consiguieron un descanso. Alberto salió de la sala y se dirigió al baño para lavarse la cara.

Abrió el grifo y comezó a echarse agua fresca en el rostro. Mientras se secaba la cara con la manga oyó una cisterna y como se abría una puerta de uno de los cubículos detrás de él.

Levantó la vista y se encontró con el chico que ocupaba sus pensamientos detrás suya.

El muchacho le sonrió de lado y arqueó la ceja izquierda.

-Buenos días presidente. Estaba esperando la oportunidad perfecta para saludarle.

Alberto se enderezó y carraspeó.

-Buenos días, Íñigo. Ha pasado mucho tiempo.

_______________________________________________________________________________

FLASHBACK

Alberto abandonó el aula, por fin. En su mente y en su alma sintió una liberación que llevaba deseando diez meses.

Recorrió el pasillo hasta llegar a la puerta del instituto. Nunca había sentido tantas ganas de algo como de abandonar el instituto para siempre. Por fin pasaría el largo verano y podría irse a Madrid, lejos de todo.

Cruzó la puerta y se abrochó la chaqueta de chandal, ya que hacía frío, cuando oyó la voz odiosa que le llamaba.

-Eh Albertito, ven aquí que te diga una cosa.

Lluvia De VeranoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora