Desperté tarde. Aun aturdida por los ruidos de los motores del día anterior. Decidida a bañarme y aliviar mi cuerpo de la tención nocturna. Aun sentía una pizca de adrenalina correr a toda velocidad por mis venas. ¿quién lo habria pensado? Pasar del ballet a las carreras.
Entré al baño para ducharme. Ya limpia tome mis apretados jeans, una remera blanca y mi chaqueta de cuero.
Bajé, tome una manzana y le pegué una mordida. Tomé las llaves de la motocicleta y a mi celular lo coloqué en mi bolcillo. Me coloqué el casco y los lentes de sol para dirigirme al centro comercial.
Las grandes puertas de vidrio se abrieron y una luz segó mis ojos, las personas caminaban llenas de bolsas, eran "bolsas con patas" tal cual decia June ¡demonios! de verdad la extrañaba.
Ahora el desafío era encontrar el vestido para esta noche. Verdaderamente odiaba las cenas familiares, más aún por que la tía Betty siempre me presentaba hijos de sus amigos, según ella me urgía tener un novio, pero que mas dá, tengo 17 años y jamás necesité de uno, puedo cuidarme sola. Pero tenia que ir, despues de todo, la tía Betty era quien me mantenía, no podía ser tan malagradecida.
Miré los pasillos, buscando alguna vidriera que llamara mi atención, y la encontré.
Un vestido negro de cuero relucía en un maniquí. "Cuero negro, perfecto" pensé mientras entraba a la tienda.
"¿Puedo ayudarla?" Una voz chillona se hizo presente.
-Oh, si por favor,ese vestido que esta en vidriera-le respondí con gentileza
-en un segundo-dijo y se alejó
tomé asiento y esperé mirando la vidriera de enfrente, unas botas negras hasta la rodilla. También de cuero negro que parecían ser hechas para mí, me pedían a gritos ser compradas.
-aquí tiene señorita- dijo la mujer mientras me entregaba el vestido-puede probárselo por ahí. Tiene suerte, esta en liquidación- terminó
-gracias-le sonreí y me dirigií al probador.
El vestido hacía que mi busto resaltara increiblemente. Se adhería como latex a mi cuerpo y moldeaba mi trabajado tracero.
-me lo llevo-le dije a la mujer entregandole el vestido junto con la tarjeta de crédito.
-enseguida-dijo y fue a cobrarmelo
Salí de la tienda para ver las botas.
Tenian una increible plataforma y unos tacones verdaderamente delicados.
"genial" pense mientras empujaba la puerta para probarmelas
-¿si?- dijo un muchacho de cabellos cafes y enrulados
"verdaderamente atractivo" pense mientras me perdia en sus ojos color esmeralda.
-¡señorita!- dijo sacandome del trance
-si, perdón, las botas negras porfavor- dije señalandolas
-claro, espere por aquí, tome asiento por favor-dijo indicando el lugar donde debía sentarme
Me senté y le sonreí. Él me devolvió la sonrisa haciendo que unos oyuelos se formaran en sus mejillas.
Tal vez solo era el hecho de que mi periodo había comenzado y que mis hormonas estaban alteradas, pero a quien engañaba. Queria besar esos increibles labios rosas.
-acá están-dijo pasandome las botas
Me las probé y verdaderamente las amaba
-no sé el precio de estas cosas pero ¡mierda! sí que me gustan- le dije mirandome al espejo-me las llevo-
-claro-dijo sonriendome-pase por aquí
-claro Harry-le dije mirando su nombre en el bordado de su camisa.
-si, Harry, pero puedes decirme Hazza si quieres- dijo mirandome coquetamente
-Está bien, Hazza-dije respondiendo de la misma manera
-¿efectivo o tarjeta?
-tarjeta
-¿crédito o débito?
-crédito
-¿número de documento?
-aqui tienes- dije pasandole la identificacion
-¿teléfono?
-¿y eso para que?
-para mí- dijo ruborizándose
-ya sé donde buscarte, quetal si...
-Esta noche no puedo...
-Tranquilo yo tampoco puedo.
Tomé la bolsa y le dirigí una mirada
-Hay que hacer algo- dije pasandole un papel con mi número de teléfono.
-Claro-dijo seguro y sonriente
-Demonios que hermosa sonrisa- dije sin pensarlo
-Pues, gracias-dijo coqueto y seductor-pero tú no te quedas atrás, nena-ahora sonó mas seguro y sexy
Sonrió con picardía y yo le respondí con otra sonrisa
-nos vemos luego Hazza-dije saliendo por la puerta
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-Ven Julie- dijo mi tía-pasa que hay alguien esperandote..uy alguien se ve bien bonita-continuo mi tia
-gracias tia-dije sonriéndole
Iba distraída, buscando una forma de escaparme o una razón por la cual uir.
-Bien Julie el es..-mire al chico, unos ojos celestes como el cielo y cabellos rubios-Niall Horan. Niall ella es mi sobrina Julie. Bien, los dejaré para que se conozcan. Adiós-dijo alejándose
-¡Demonios!-dijo el rubio
-¿Qué sucede?- pregunté
-Es que tu tia me invitó a venir pero no sabía que era para esto, veras yo... tengo novia y..
-¡¿tienes novia?! ¡genial! No sabes lo felíz que me haces- dije
-¿a sí?-dijo confundido
-si rubio, verás. Todos los años Betty hace estas fiestas para presentarme a alguien, pero no creo que sea necesario, aunque ella cree que necesito un hombre que cuide de mí, yo no lo creo así. Sé cuidarme yo sola, y ahora que tienes novia puedo irme de esta mierda.-dije explicandole
-oh... Sí es así, genial. Igual podemos ser amigos si quieres-dijo
-claro Horan, luego hablamos ¿sí?- dije revolviendo su cabello.
-claro Julie-dijo sonriendo
Intercambiamos números y yo ya iba saliendo mientras me colocaba la chaqueta de cuero cuando una voz me detiene.
-¿a dónde crees que vas?-dijo una grave voz detras mío.
volteé lentamente para lista para enfrentar a la persona pero ahí estaba él. El chico de la zapatería. Con un pantalón de traje negro ajustado y una camisa blanca con las mangas arremangadas hasta antes del codo con los brazos crusados. Llevaba una corbata roja floja y converse blancas. Sonreí al verlo.
-me largo de aquí. ¿quieres venir?-le dije
Miró para todos lados antes de contestarme.
-está bien, traviesa, ¿a dónde vamos?- preguntó curioso
-¿quiero un café, ¿tu no?-dije tomando su mano y corriendo hacia afuera..
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La chica de las carreras (harry styles) -editando-
FanfictionJulie Bunstrow era una chica de clase alta, muy educada y reservada pero todo cambia cuando su madre muere, a su padre lo meten preso y su mejor amiga se ausenta. Julie cambia, y por primera vez en su vida, se atreve a vivirla cuando conoce a Harry...