Prólogo

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Era un día normal para Alison King, trabajaba a cargo de los grandes telescopios en un prestigioso centro de astronomía. Su única ocupación era vigilar el comportamiento de las estrellas, y chequear que nada anormal ocurriera, lo cual era bastante monótono ya que eran...estrellas, y difícilmente ocurriría algo especial con ellas. Solo trabajaba por el dinero, su madre estaba enferma y necesitaba cuidados especiales, los cuales eran muy costosos. Fue por una taza de café y se ubicó en su habitual puesto de trabajo, con los pies sobre la mesa. Miraba las estrellas cuando algo llamo su atención: Grandes estrellas se movían velozmente y se dirigían hacia la tierra, 1, 2, 3... 16 en total, no sabía qué hacer ya que nunca se había presentado una situación como esa. Esa noche le tocaba trabajar sola, ningún supervisor, ni compañeros, ni nadie a quien avisar. Decidió llamar por teléfono a Mery; una científica que se había hecho su fiel amiga. Contesto rápidamente y le conto lo sucedido, ella le dijo que no hiciera nada y la esperara ya que ella iría pronto.

Cuando llegó Mery, se fue directamente hacia los controles y tomo medidas posibles de los astros que se acercaban a la Tierra.

-Curioso... por su tamaño no provocarán ningún daño, son como... del tamaño de un bebé y según las aproximaciones caerán en diferentes lugares del mundo... Creo que no harán gran daño pero de todas maneras quiero investigar...-dijo Mery

-Esto es tan raro...-dijo Alison

-Si... sobre todo ya que no son meteoritos...-respondió Mery-nunca vi algo así, el primero caerá cerca de acá, vamos pronto y podremos analizar...

-Está bien...-Dijo Alison, sin mucha convicción

Se dirigieron a las afueras de un pueblo de Escocia, que es donde llegó el primero... lo que sea que fuera. Grande fue su sorpresa cuando llegaron y no había nada..., nada excepto marcas de un pequeño impacto en la tierra, pero no el objeto en cuestión.


Experiments: The SalvationDonde viven las historias. Descúbrelo ahora