Cuidando al Eddie Junior

A solas

Nicolás se estaba demorando mucho en llegar y la preocupación de Iván aumentaba, su ansiedad lo hacía mirarar su celular cada 2 minutos, donde veía si tenía mensajes en Whatsapp, veía la hora y lo bloqueaba. En cambio Jaime ya estaba acostumbrado, se dedicaba a conversar con el Edgar por Whatsapp, se mandaban audios y se reía, Iván lo miraba extrañado.

- Ehmm, ¿Jaime?- se acercó a él- ¿y si lo llamamos?-

Jaime lo miró y rió.

- Te preocupai mucho weon- golpeó su hombro- el weon ES así, se pone mina y empieza a vitrinear la culiá-

Ivan no quedó satisfecho con la respuesta de Jaime, se estaba haciendo tarde ¿dónde estaría su amado? o mejor dicho ¿qué estaría haciendo? La desesperación se lo comía por dentro, esa sensación que pocas veces se le hacía presente apareció. Le dolía la cabeza... y mucho, se sujetaba la cabeza con ambas manos y cerraba los ojos, cerró con fuerza sus dientes  soltando unos pequeños sonidos proviniendo del choque de aquellos.

- Nico por la cresta- pensó Iván cansado.

Jaime lo miraba de reojo sin quitar su gran sonrisa, rápidamente le envió un mensaje a Edgar con un "Voy a tomar once, chao"  y se puso de pié, en frente del agobiado Iván.

- ¿Quieres comer algo?- lo miró serio.

Iván levantó la mirada para encontrarse con Jaime, se quedó un buen rato viéndolo en la posición que estaban, cambió su rostro a uno serio y le contestó.

- ¿Enserio no te preocupa el Nico?- se levantó, quedando frente a frente con su enemigo - ¿qué clase de amigo eri'?-

Jaime suspiró.

- ¿Quién te creí voh wn? Yo sé que hace el Nico, por algo vivo con él aweonao- Jaime, con el dedo índice, lo comenzó a pseudo golpear en el pecho- el Nico aveces sale a reflexionar de la vida, no sé por qué, pero lo hace y se demora caleta- tomo una pausa- como buen amigo, LO DEJE SER ¿entiendes? el necesita su espacio de vez en cuando...-

Jaime caminó hacia la puerta y se detuvo.

- Si tanto te importa el Nico- se giró para mirar a Iván- llamalo-

Dicho eso se fue a la cocina.

Iván tomó su celular, lo desbloqueo y marcó el número de Nicolás...miró el número y comenzó a dudar, "¿Debería dejarlo? Creo que estoy exagerando un poco, el Nico de todas formas es un adulto". Bloqueó de vuelta se celular y se sentó en la cama.

- Ah tata- el bebé se despertó- ¡AH!- soltó un agudo grito.

- Bebé culiao- lo tomó Iván- ¿cómo te despertaste cochino?-