-Si Oyes que el pasado te habla, si sientes que tira de tu espalda y que te pasa los dedos por la columna, lo mejor que puedes hacer, lo único, es correr (Alex)
-Amor, la más mortal de las cosas mortales. Te mata cuando la tienes como cuando no la tienes. Pero no es así exactamente, eres el que condena y condenado, el verdugo, la cuchilla, el indulto de última hora, la respiración jadeante y el cielo tormentoso, y el gracias, gracias Dios. El amor, te mata y te salva a la vez.
-A veces siento que si uno observa las cosas, sí se sienta quieto y vieja que todo exista frente a el, el tiempo se detiene por un instante y el mundo se congela a medio giro. Sólo por un instante y de algún modo uno es capaz de vivir en ese segundo, puede vivir para siempre.
-Y aunque me encuentro en medio de la mayor multitud que he visto en mi vida, me siento completamente sola (Lena)
-Quién trata de alcanzar el cielo de un salto puede caerse, es cierto. Pero también puede ser que vuele.
-Es Entonces cuando te das cuenta si casi todo, la vida, el incesante mecanismo de existir, no tiene que ver contigo. No te incluyen en lo absoluto. Va a empujarte hacia adelante después de que hayas saltado más allá. Incluso después de que hayas muerto.
-Las enfermedades más peligrosas son aquellas que nos hacen creer que estamos sanos.
-Un día tienes un lugar y un camino. Al siguiente estás perdida en una selva (Lena)
-Prefiero morir a mi manera que vivir a la suya. Prefiero morir Amando a Alex que vivir sin él (Lena)
-Ya sabes que no puedes ser feliz a menos nos que seas desgraciada alguna vez ¿verdad? (Alex)
-Te amo. Recuerda, eso no pueden quitártelo
-No es gris exactamente. Es el color del cielo justo antes de la salida del sol, ese color pálido indefinido. Siempre me ha gustado, porque lo relaciono con la esperanza de que suceda algo bueno (Alex)
-Todo el mundo está dormido. Llevan años dormidos. Tú parecías... Despierta. Estoy harto de dormir (Alex)
-El odio no es lo más peligroso. Es La indiferencia.
-Eso es lo que Alex es ahora: una sombra de Chico, una ilusión (Lena)
-Y Cuándo empezó a oscurecer apuntaste al cielo, y dijiste que habia una estrella para cada cosa qué amabas de mí (Lena)
-Yo soy tu pareja, no tu perro.
- Ojo por ojo
-Y todo el mundo queda ciego-¿Me amas?
-Nunca dejé de hacerlo-Te voy a encontrar. No voy a dejarte ir otra vez.