Diario obsoleto

Agosto.

Si en la vida hablan de alguien enamoradiza, torpe y rara, definitivamente hablan de mí. Hoy me miraba frente al espejo y la verdad no sabía que odiar más, estaba entre esa espinilla sobre mi ceja o mis no tan disimuladas ojeras. Rayos, no sé cómo aun no entiendo que quedarse hasta la madrugada esperando mensajes que nunca llegaran no me está haciendo bien. Pero es inevitable, quizá ustedes también harían lo mismo si ven al chico que les gusta "En línea". Maldito Andrés.

Como este es un diario nuevo, (el otro sabrá Dios donde está), les contaré un poco sobre mi vida:

Mi nombre es –SAMYYYYYY LEVANTATE!—Ok, comenzaré por esa señora que acaba de gritar. Probablemente es la persona que más amo en este mundo, mi mamá. No sé cómo se fijó en mi papá, porque es hermosa. En cambio Pat, es mi padre y todo, pero hay que reconocer que no es un brad pit. Igual dicen que yo soy la combinación de ambos, así que tan fea no soy jaja. Después, están mis hermanos, somos tres...

– ¿TU QUIERES QUE VAYA A LA UNIVERSIDAD POR TI?—aaaah mamá ya vooooooy!! (Continuaré después, voy atrasadísima).

Saben, no hay nada más difícil que levantarse a diario para luchar por un sueño que no es del todo tuyo. Estudio leyes en una prestigiosa universidad, donde seguramente muchísimos chicos se mueren por entrar. Pero aquí voy yo, con audífonos escuchando música semi-depresiva y pegada al wathsapp hablándole a la única amiga de mi grado, Mari, para ver si llegó antes que yo.

Cuando iba al colegio era todo mucho más fácil, me iba excelente, mi grupito de cuatro amigas era todo lo que podía necesitar, y lo tenía. Ahora en cambio, es tan difícil encontrar personas con los mismos intereses de uno, más en una carrera como la mía donde pareciera que solo quieren irse de fiesta y pasarla bien. No es que yo sea una amargada, o quizá sí, pero yo me divierto más con una buena conversación, películas, o simplemente mirar el atardecer con buena compañía.

Detesto profundamente subir esta maldita escalera, ¡Me tocan casi todas las clases en el tercer piso! Aparte, al llegar a la sala lo primero que veo es la cara del ser más drogo, Ed. Pobre, si supiera que sus intentos por seducirme no resultarán. Aunque a él le encantan todas las chicas de piel tostada,así que da igual que le dañe su ego un poco.

Aunque no lo crean, desde que entre a la universidad he tenido varios admiradores, nunca me he considerado una chica tan atractiva; Soy de estatura baja, tengo el pelo ondulado (Aunque me gusta traerlo liso casi siempre), y mis ojos son como el color del café que me sirvo en la mañana. No me animo con ningun pretendiente porque aunque no lo quiera reconocer aún estoy no sé.. yaa, no quiero ni pensarlo: Enamorada.

El amor para mí es como lanzar una moneda al aire, un día quieres besar a esa persona, y al otro día también. La diferencia está en que no sabes si esa persona continúa pensando en ti como tú en ella, no sabes si desea tus labios como antes. Hay dos opciones, o eres feliz, o simplemente sufres.

Lamentablemente a mí me tocó la segunda opción, sufrir.

Después de esta larga meditación al fin vi entrar por la puerta al profesor, y ésta Mari aun no llega! Siempre se atrasa, debe haberse quedado dormida o el metro se le pasó, da igual. Uf, acaba de llegar. Se salvó.

Ella tiene novio y llevan varios años ya, con altos y bajos como toda relación. Pero a pesar de todo siguen juntos, que lindo es el amor a veces.

-Pelado maldito, nos dará quince minutos para la evaluación del lunes, imagínate, si con la que tuvimos veinte míseros minutos me saqué un 4.5 con esta moriré- Le digo a Mari, ella me mira con cara de odio también. Eso me gusta de ella, que aunque le va bien comparte mis odios hacia los profes.