Prólogo.

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-Entiendan no me puedo quedar aquí con los brazos cruzados.-Dije.

-Escucha si no están aquí es porque nunca estuvieron.-Dijo Candace.

-Déjenla si se quiere quedar es su problema, no nos quedan más que cuatro minutos y los van a desperdiciar en convencerla de una tontería.- Dijo Anne.

Entonces, una alarma sonó, en lo que a mi concierne faltaban aproximadamente tres minutos, esa alarma estaba adelantada.

-Nos quitaron tiempo.- Dice Will.

-Seguro es una trampa, hay que esperar.- Dice Scott.

Tomo la caja y corro.

-¡Evelyn,espera!-Me grita Max.

Qué pasaría si Amanda se había notado que los agentes ya se habían dado cuenta y era nuestra única oportunidad de salir, cuando mire atrás para ver si ellos ya habían salido, no me había equivocado venían detrás de mí. Salimos del edificio justo a tiempo antes de que alguien a través del megáfono comunicara: Todos aquellos que están fuera del edificio, favor de volver adentro, estamos teniendo fallas técnicas.

Llegamos a la pared, era hora de poner en practicar lo aprendido, con lo que corrí tomé vuelo y salte lo más alto posible a la pared, con todas mis fuerzas me aferré a la pared.

Cuando mire abajo, sabiendo que no lo debía de hacer, vi a Candace que intentaba escalar y no podía hacerlo por el accidente de su mano, tuve que bajar a ayudarla.

Le di un empujón lo mas fuerte que pude, parecía ser que mi ayuda le sirvió porque empezó a escalar, agentes se acercaban a hacernos bajar, necesitaba correr para tomar vuelo, pero él área ya había sido invadida por gentes, pensé que lo mejor era pasar la caja con el diamante y la lance lo más alto que pude al otro lado de la pared, al parecer funcionó, aunque yo no corrí con la misma suerte, solo grité.

-¡Fin al maldito gobierno!

Después de ello sentí un golpe en mi cabeza y supe que ya era demasiado tarde.

Ruins (The black diamond)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora