"-Señor, tengo el corazón roto en mil pedazos.
- Entonces repártelo entre miles de personas."
A veces, sólo a veces, deseaba ser capaz de chasquear los dedos y que las cosas sean como más quisiera; que lo malo desaparezca, que las compañías sean agradables, irse a dormir en calma...
Pero no podía. En lugar de eso, intentaba resolver los distintos problemas y no siempre lo conseguía, los amigos se iban y su descanso a veces no llegaba. Sobrepensarlo sólo lo dañaba más, cosa que, desafortunadamente, se le notaba con facilidad.
Todos en casa sabían que el cangrejo se hundía un poco más y más en la depresión. Cada uno, a su modo, intentó animarle, y aunque Cáncer les agradecía, no lograban hacerlo completamente feliz. ¡Incluso Capricornio quiso hacerle reír! Sin embargo, el signo de agua comenzaba a preferir su habitación a estar con ellos, lo cual ya empezaba a preocupar a los nueve restantes.
- ¡Anda, Cáncer! -Aries, con los ánimos arriba, tocaba insistentemente la puerta del signo-. El día es perfecto para salir, iremos a donde quieras, lindura.
La puerta se abrió sólo un poco y ojos claros se asomaron. Cáncer no lucía bien; cabello desordenado, ropa holgada, ojeras horribles... Aries casi da un paso atrás.
- Eh..., hola...-le sonrió el de fuego-, los chicos y yo queremos...
- Escuché-suspira-, y gracias, pero no me siento con el humor para salir -añadió y, antes que Aries intentara un secuestro, le cerró la puerta.
Aries resopló frustrado y refunfuñó varias cosas feas antes de abandonar el lugar a grandes zancadas.
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Como veinte minutos después, Cáncer tuvo que levantarse una vez más de la cama. En esta ocasión, Libra era quien tocaba a su puerta, y sabiendo que éste era más diplomático que Aries, le dio la oportunidad de pasar.
Se dejó caer en la cama extendiendo los brazos, preparado para el monólogo.
- Vaya...-murmuró Libra al ver el lugar; parecía que Cáncer no ha limpiado en días, cosa bastante inusual. Pero no estaba ahí para criticar la higiene de su amigo-. Aries dice que te volviste homo y oscuro como el alma de Hitler, pero estoy seguro de que quiso decir emo.
- ¿Sólo porque no quise salir a pasear? -Cáncer entorna los ojos haciendo un gesto que Libra no reconoce, o al menos no en Cáncer-. Exagera, estoy bien..., sólo quiero alejarme un poco de todo por ahora.
- Eso no suena a estar bien.
- Cada quien define el bienestar a su modo y a su gusto. Y el mío no tiene porqué encajar con el tuyo.
Libra hace una mueca con sus labios y se siente un tanto ofendido, pero mantiene la calma, porque debe.
- Estamos preocupados.
Y, como si fuesen palabras mágicas, la expresión de Cáncer se suaviza cuando sus miradas se encuentran.
Ah, había olvidado que él siente culpa.
- Lo sé, y lo siento, pero estaré bien... -aparta la mirada hacia el techo, sus ojos se cristalizan. Ambos guardan un largo silencio antes de que se decida a hablar otra vez-. Pensé que lo tenía bajo control, pero de un día para otro, la idea de que estoy siendo abandonado me sugestionó tanto que ya no pude sacarlo de mi cabeza... Se supone que este es nuestro hogar, que debemos estar aquí...
Las emociones de Cáncer son fuertes, tanto que Libra comienza a sentirse agobiado también. Cáncer lo está llevando con él.
Traga grueso y desvía su mirada al suelo.
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Los colores del Zodiaco
RomanceHey, ¿sabías? Que ellos resultaron ser más humanos al final.