HE PECADO

El lobo

Su nombre.

Flashback

Me encontraba detrás de la puerta del cuarto de mis padres con mi hermano Damon.Yo solo tenía cinco años
No viviamos en una casa normal era más bien una mansión.
Escuchabamos los gritos de nuestros padres al otro lado de la puerta.

-Esa niña es un monstruo,¿Es que no te das cuenta Elisabeth? Acabará con todos nosotros como dicen las escrituras,es el pecado en persona.-Se escucho un fuerte golpe acompañado de la voz de mi padre-

-¡N-no es ningun monstruo, es mi hija! No voy a permitir que la pase nada por un libro estúpido- Grito con las pocas fuerzas que la quedaban-

Yo empece a llorar tapandome la cara con la camisa de mi hermano.
-No voy a dejar que te ocurrá nada-Dijo mi hermano mientras me abrazaba-

-Pues tendrás la misma suerte que el humano por el que me abandonaste.
Es lo ultimo que escuche antes de que todo se convirtiera en llamas.

Desperte al oir a Damon llamarme varias veces.
Me abrace a él llorando.

-Todo fue por mi culpa,han matado a todos por mi culpa.

Me abrazo con fuerza mientras me decía:

-Nada es tu culpa Alexandra.
Me limpio las lágrimas de los ojos.
Me quedo mirando sus preciosos ojos azules,un escalofrío recorrio mi piel con solo notar su mano.

-Duchate y despejate un poco.
Estaré abajo,todo la ropa del armario es para ti.-Dijo con una sonrisa en la boca y saliendo de la habitación.
Me levante de la cama y fui hasta el baño.
Era un baño muy moderno,tenía una bañera enorme.Era blanco y con una pared de granito.
Baje ambas tiras de mi sujetador dejando que cayeran por mis hombros y lo desabroche
Hice lo mismo con la braguita que llevaba de flores,la verdad es que no tenía ropa interior muy sexy.
Contemple mi cuerpo desnudo en el gran espejo del baño,mi melena roja brillaba con mas intensidad,mi cuerpo estaba repleto de curvas,tenía un cuerpo perfecto.Mi cara estaba por fin libre de ojeras e inperfecciones y mi color palido lucia como si fuese porcelana contrastando con mis mejillas sonrojadas.
Me sentía una diosa.
Era una diosa.
Despues de una larga ducha de agua caliente rodee mi cuerpo con una toalla pequeña y fuí al armario en busca que ponerme.
Escuche unas voces desde fuera,me asome a la ventana y eran mi hermano y un chico moreno,un hombre lobo.
Los hombres lobos y los vampiros se llevaban bien por un pacto.
Estaban los dos sentados en unas amacas enfrente de una piscina,asi que decidi ir.
Cojí del armarío un bikini de color rosa palo traa ponermelo me mire en el espejo.

Me quedaba como un guante.
Cogi una toalla de color negra y sali de mi cuarto.
Damon al parecer vivia solo en una urbanización de chalets bastante lujosos,no habia perdido el tiempo me pregunto de que humano sería.
Sali al jardin,un jardin precioso con un balancin,la piscina y todo decorado lor flores.
Me coloque delante de las amacas donde se encontraban los dos y coloque la toalla en una de ellas.
-Es Alexandra una amiga. El es Tom.-Dijo mirandome fijamente.

¿Como que una amiga? ¿Acaso nadie podía saber que era mi hermano? ¿Estoy en peligro?

-Pues traete amigas como esta mas a menudo.-Sonrío de lado mientras me miraba de arriba a bajo.
Le mire sin decir nada.
Era un chico un poco menos palido que yo,con el pelo moreno agarrado con unas trenzas. Un torso perfecto ni muy musculado ni poco.
-Si las trae se espantarían, huele a chucho mojado a kilometros-Le dije tirandome de cabeza a la piscina.
Ambos se rieron mientras se metian a la piscina.
Mi pelo mojado era aun más rojo que de costumbre,iba a juego con el colgante.
Notaba que las miradas de ambos estaban clavadas en mi.
El lobo se acerco a mi posando su espalda en el bordillo.

-Sabes vas a tener que acostumbrarte a que huela a perro mojado,porque vivo aquí también.-Dijo mientras se reia-Y yo tendre que acostumbrarme a verte por la casa con poca ropa.

En mi cara se plasmo una enorme sonrisa. ¿Qué me pasaba? Que vuelva a mis origenes,a volver a ser un vampiro no significa que sea una depravada sexual.

-Acostumbrate entonces.-Dije mientras salía de la piscina y me colocaba en una amaca-

-¿Qué pasa que te la estas follando tú? -Dijo con tono gracioso mirando a mi hermano-

Note como mi hermano frunció el ceño y sus ojos se volvieron rojos.

-¡No hables asi de ella!-Vi como desplazo a Tom unos 10 metros sin nisiquiera tocarle.
Me puse delante de él.

-Damon para solo esta bromeando-Dije para intentar calmarle.

-¡No me des ordenes!-Me empujó contra el suelo y me que mirandole,la sangre de mi cuerpo comenzo a arder y mis ojos de tornaron de color rojo.
Me controlé y me fui a mi cuarto.
Me sente en la cama y mis ojos se llenaron de lágrimas.
Unos brazos calidos rodearon mi cuerpo y una de sus manos seco mis lágrimas.

-Perdoname,le he provocado yo.-Dijo Tom mientras me limpiaba la ultima lágrima.
Sus ojos color miel no se apartaban de los mios,los dos sabiamos lo que queriamos.

Cuando me quise dar cuenta lo tenía encima de mi con sus brazos a cada lado de mi cuerpo.
Rodee su cuello con mis brazos y lo acerque a mi.

Los dos nos quedamos mirandonos a los ojos y mi respiración se empezo a acelerar cuando sus labios rozaron los mios.