Stone cold ; narry os

Stone Cold

Frío como una piedra.

Debo ser frío como una piedra.

Lo veía. Veía cómo lo miraba, cómo lo besaba. Lo amaba. Como alguna vez me amó a mí. Como yo lo sigo amando.

Ojalá lo supiera.

Ojalá lo supieras, Harry.

Ojalá supieras que estoy muriendo en el suelo cuando te veo con él. Cuando veo el amor en sus miradas como alguna vez lo hubo en las nuestras. Cuando veo cómo lo miras y aprecias todo lo que hace. Cuando veo la manera en que mira tus labios sabiendo que son solamente para él y para nadie más. Cuando lo besas y bailan al ritmo de la música como alguna vez lo hicimos tú y yo. Cuando le dices "te amo" desde el fondo de tu alma y el responde "yo también" con la misma intensidad. Y yo sólo puedo fingir que hay algo interesante en la pantalla de mi teléfono, porque estoy perdido.

Debería dejar de llorar, tal vez así ya no sienta nada. Tal vez así ya no sienta nada por ti, cosas que no debería sentir más, cosas que decidimos no sentir por el otro. Pero es inevitable, Harry. Tal vez te dije que estaba bien cuando me dijiste que teníamos que seguir nuestros caminos por separado, cuando me dijiste que no estábamos hechos para el otro y que estaríamos mejor así. Tal vez te dije que podría soportarlo sin que estuvieras a mi lado, tal vez te dije que podría superarlo y seguir adelante, que no me quedaría estancado, me hiciste prometerlo y lo hice. Pero, Harry... Yo no puedo seguir así. Tal vez también te mentí y no decía todas esas cosas en serio, tal vez te necesito ahora más que nunca. Pero ya no puedo tenerte, porque te dejé ir.

Todavía no puedo comprenderlo. Estábamos tan bien, íbamos de maravilla. O tal vez sólo yo lo veía así. Debí equivocarme en algún punto, dije la palabra equivocada en el momento equivocado, metí la pata y fui lo suficientemente estúpido y ciego como para no darme cuenta. Pero pasó y todo se fue para abajo desde ahí. No eras feliz, lo entendí y por eso te dejé ir.

Y es que sólo quería que fueras feliz. Daría todo de mí por ver tu hermosa sonrisa, tus bonitos hoyuelos, aunque no sea por mí. Lo entendí, Harry, yo no seré siempre el que causará que tu bella sonrisa aparezca, yo no seré siempre la razón de tu felicidad, debo aceptarlo. Aunque duela. Podré con el dolor, mi corazón puede con el dolor.

Pero es difícil, ¿sabes? Verte con él es difícil. Supongo que él es mejor que yo, supo tratarte mejor que yo, supo amarte mejor que yo. Es mejor que yo y entiendo si lo prefieres a él. Es difícil. Recuerdo cuando me decías que era lo más valioso de tu vida, la piedra más preciosa del cofre del tesoro que habías estado buscando por mucho tiempo. Como un ámbar, la piedra del amor. Y cuidaste de esa piedra como si de tu vida se tratara. Pero te diste cuenta de que el cofre estaba también lleno de oro, mucho más valioso que el ámbar y decidiste llevártelo y dejar aquella piedra atrás, volviéndose fría.

Frío como una piedra.

Quisiera poder arreglarlo todo, regresar al principio y hacer las cosas bien, repetir todo de nuevo y tal vez cuidarte un poco más, quererte un poco más, dar más de mí de lo que di. Pero hay cosas que no puedes realizar y solo me queda aceptar que te fuiste y despedirme de una vez por todas, renunciar a los sentimientos que tengo por ti. Debo ser frío como una piedra.

Pero estoy feliz por ti, quiero que lo sepas. O al menos he tratado de estarlo. A pesar de todo el dolor que siempre parece estar a punto de hacer todo mi cuerpo explotar, a pesar de que lo haya hecho un par de veces, me alegro por ti. Porque tú sí pudiste salir adelante fácilmente, porque tú no te estancaste como yo ahora, porque tú no te has vuelto frío como yo lo he hecho, porque encontraste a alguien que pudo hacerte sentir de nuevo esa sensación tan bella de sentir mariposas en el estómago y ver el mundo de mil colores con sólo mirar a esa persona especial y saber que es tuya. Porque puedes hacer a esa persona sentirse igual y hacerla feliz, porque has logrado que te ame de vuelta. Porque eres feliz, aunque no sea conmigo y eso es lo único que necesito, es lo único que me mantiene vivo. Si eres feliz me alegro por ti.

Es mejor así. Es mejor para los dos. Hiciste lo indicado al terminar con una relación con la que no estabas satisfecho, hiciste lo mejor al cortar la rama antes de que pudiera crecer demasiado y romperse. Hiciste lo correcto. Prefiero darme cuenta de que ya no sentías lo mismo a darme alas y volar hasta tocar las estrellas para luego caer y estrellarme contra la realidad. Prefiero saberlo todo y encarar la verdad a que tengamos una relación disfuncional donde ambos saldríamos muy lastimados al final.

Puedo salir adelante, yo sé que puedo hacerlo. Y aunque me duela verte partir y hacer tu vida con alguien más tengo que levantarme de los escombros, juntar mis pedazos y buscar una luz. Nunca estamos del todo perdidos, siempre hay una opción. Voy a encontrar una manera de salir, así tenga que arrastrarme por los más angostos pasillos y atravesar los más peligrosos puentes, voy a llegar al otro lado, cueste lo que cueste, tarde lo que tenga que tardar. Voy a llegar, Harry, voy a ser feliz, así como tú lo eres, así como lo es él. Lo prometo.

Cuídalo. Cuida a Harry como si fuera lo más valioso que tienes, porque lo es y como él no hay nadie más. Ahora es tuyo y de nadie más. Dile que lo amas y bésalo todos los días como si fuera la última vez que podrás hacerlo, no dejes que se te resbale de las manos. Cuídalo, Harry. Cuídalo como me cuidaste a mí. Ámalo como me amaste a mí. Si puedes aún más. No lo dejes ir. Tal vez ustedes sí estén hechos el uno para el otro, tal vez sus destinos se pertenecen. Y si es así, no se dejen ir. Solamente hay alguien hecho a tu medida.

Si eres feliz me alegro por ti.