¿Como No Notarte? (EDITANDO)

Analizandote

Toda la noche pensé en ti, no te podía sacar de mi cabeza, te había dejado entrar en mi corazón, en mi historia, en mi vida... En mi mente.

- Samanta...- era lo único que mi mente repetía, Samanta.

*********

- Amigo, te has enamorado - me dijo Arol, mientras hablábamos por teléfono.

No recuerdo exactamente como llegamos a conversar sobre Sam. No recuerdo tampoco porque iniciamos a hablar por teléfono.

« Sam... Sam..» esa palabra retumbaba en mi mente, causaba migraña, pero la soportaba. Soportaba todo por ti, soportaría todo por ti. Lo se, estoy enfermo, pero ambos sabemos que los dos somos culpables, y aún así no me arrepiento de nada.

- No, para nada, que clase de persona se enamora de alguien sin siquiera conocerla. - le dije en verdad una gran mentira, pues sólo un tiempo después me di cuenta, de que para esas alturas yo ya estaba pérdidamente enamorado de ti, para esas alturas tu ya habías entrado en mi vida, para esas alturas ya estaba enferma mente enamorado de ti...

Para esas alturas no estaba preparado para dejar todo atrás por ti...

- Eso depende de la percepción que tengas sobre "conocer a alguien". - dijo Arol, tratando de tener la razón.

- Bueno, aún así, ¿Como es que no la note antes?...

- No fuiste el único, Ema tampoco la notó antes de que la fiesta iniciará.

- Si, pero tu novia nunca nota a alguien, o algo que no sea su cabello - «Su ridículo cabello », pensé. En esos momentos sólo visualizaba tu lindo cabello, y en que, por más que Ema cuidara su cabello con caros cosméticos, el tuyo siempre será naturalmente perfecto. - Lo siento, ese comentario escapo. De todas formas lamento mi actitud de ayer en la fiesta.

- No te preocupes amigo, mi novia tampoco fue muy comprensiva.

- Gracias, amigo. - le dije con un tono sincero.

- Pero ten algo por seguro, no intentes evitar el tema de Samanta. Entonces, ¿En que íbamos?- su tono de voz sonaba interesado.

- En que, ¡No estoy enamorado! - Que gran mentira le dije.

- Si lo estas, sabes todo de ella, Ayer en la tarde, según lo que tu me dijiste, hablaron un buen rato, ¿no?

- Sí, pero aún no se nada de ella, siquiera su apellido. Lo único que descubrí fue que ella sabe mucho sobre mi, pues le gusto desde hace ya mucho tiempo, o por lo menos, eso trató de decirme.

- Su apellido es Park, por si te lo preguntabas, lo se porque en una ocasión realizamos un proyecto para la escuela juntos. De todos modos es lindo saber que se gustan mutuamente, tal vez ella pueda ser tu primera "novia".

El comentario de Arol me molesto, porque era verdad, aunque me avergüenza decírtelo ahora, nunca tuve un noviazgo serio, e salido con varias personas, bueno por ahora no, aún aguardó tu llegada. Jamas tuve una novia enserio, o jamás quise a alguien tanto, hasta que tu entraste a mi vida, a mi historia, a mi ser...

- Primero que nada, gracias por el dato, segundo, no se si en verdad le gusto o sólo fue algo que dijo por la tensión del momento, igual que ese beso que nos dimos... De todas formas no creó que lleguemos a ser novios, por ahora no necesito una novia, creó que ella tampoco nesecitas un novio. A parte, no estoy seguro si yo le gusto o ella me gusta o...

- O tal vez se gustan mutuamente. - Dijo Arol cortando lo que yo iba a decir.

- No lose amigo... Y por ahora no creó que importe.

********

Hable toda la mañana con Arol, sobre lo que en verdad éramos en ese entones. En la tarde salí con mamá a comprar una pizza para el almuerzo, aún así, todo el día estuviste en mi mente. Mi día fue bastante aburrido, hasta en la noche, cuando en mi teléfono apareció: "Llamada entrante de Samanta". Mi corazón y mi estómago se recalcaron, ansiaba ese momento, aunque no sabía el motivo de tu llamada, la ansiaba. Quien no ansia la llamada de alguien, por quien has esperado todo el día, toda tu vida o incluso alguien que aún esperas que regrese, así sepas que es difícil que vuelva.

- Hola Sam.

- Eso es.

- Es... ¿Qué?

- Me llamaste Sam, ayer también. - su voz sonaba eufórica.

- Sí, ¿y qué pasa, no te gusta?.

- Me encanta, es mi primer sobrenombre que tu me has dado, ¿Cual quieres que sea el tuyo?

- No lo se, Joe no es un buen nombre para colocarle sobrenombres.

- Mmmm... Ya pensare en algo. ¿Como has estado?.

- Ahora estoy bien, estoy hablando contigo, eres una de mis personas favoritas para hablar.

- Gracias, sólo llamaba para aclarar lo que paso a noche, yo no mentía, pero aún me trae confundida, aquel beso. - su tono era firme, me intimidaba.

- Bueno, emm... - estaba más nervioso que la primera vez que te hable. - Lo hice porque... No quería que te fueras.

- ¿Por que me alejaría de la persona que me gusta desde hace dos años? - en ese momento comprendí la vil trampa en la que me hiciste caer la noche anterior, no tenías intenciones de irte, sólo lo hiciste para que yo me compadeciera, y todavía esa parte siniestra es lo que más me atrae a ti.

- ¿Te gusto desde hace dos años? - Me disculpó por la estúpida pregunta que te hice en ese momento.

- Sí, crees que me alejaría de ti, cuando por fin notas mi presencia. ¿ Por que me besaste?

- Ya te lo dije.

- Yo también te dije que tu razón por la cual me besaste, no es válida para mi. ¿Por que me besaste?

- No lo se, en ese momento pensé en que te ibas a ir, y no quería perderte, sin tan siquiera conocerte un poco, aún no quiero perderte.

- Pues como te abras dado cuenta, se mucho sobre ti. Lo oculte muy bien durante estos dos años, pero ayer, deje a flor de piel mis sentimientos hacia ti, quería que lo supieras.

- Por eso sabías tanto de mi vida, ¿Qué tanto sabes? - lo dije tratando de bromear un poco, quería aligerar un poco ese ambiente tan pesado.

- Se muchas cosas ¡muajajaja! ¡muajajaja! - tu tono malévolo me causo gracia, me seguías el juego.

- Jajajaja, la niña se las da de graciosa.

- Pues sí. No quiero que pienses, que porque me gustas, quiero que seas mi novio o que te voy a obligar a que yo te guste y seamos novios, con tenerte en mi vida me basta, por lo menos ya me notaste, sólo quiero que seamos amigos y vivamos felices. Soy tan obsesiva, que contenerte cerca y verte feliz, me basta. - Cada vez caía más en tus trampas y me enredaba en tus juegos, y sólo hasta ahora comprendo todo.

- No te preocupes, esperó que nada cambie, yo también te quiero en mi vida. Perdón por no notarte antes, perdón por no darme cuenta. - estaba tan ciego, que no me daba cuenta, de que tu me estabas manipulándome y yo estaba cayendo en tu trampa, haciendo lo que tu esperabas que hiciera, aún así no me arrepiento.

- Pero enserio, se muchas cosas de ti. - Tu tono serio, frío y cruel me hizo darme cuenta de que tu en verdad estabas obsesionada, de que en verdad tu estabas enferma, de que cada día yo me enamora más.