Capítulo 2: el maestro de celestia y luna

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Luego de que se calmaran los aires, alrededor de twilight, salió de su mundo mental para saber las razones de ese beso forzado.

Twilight: (enojada) me pueden dar una explicación de lo que acaba de pasar?

Royal: (sin expresión de culpa) solo hice el ritual, que necesitaba para poder comunicarme con ustedes, eso me pidieron.

Twilight: pero era necesario besarme, ni siquiera te conozco lo suficiente para siquiera considerarte un amigo.

Celestia: twilight perdón por no decirte del ritual, pero esa era la forma más rápida que tenía.

Luna: cierto, además era parte del hechizo, así que puedes decir que no fue un beso real.

Twilight: pero aun así fue muy inoportuno, ¿por qué no podían decirme como era el ritual?

Royal: (acercándose a twilight) era necesario que tu mente estuviera vacía por un momento, de esa forma pude ver lo quería en tu mente, y no lo que tu tenías en mente en ese momento.

Twilight: mejor me lo hubieran dicho, así al menos no me tomaría por sorpresa.

Royal: ¿te habrías relajado sabiendo que yo te besaría?

Mientras le decía eso acerco su cara a la twilight, y ella instintivamente se alejó.

Royal: ves no hubiera resultado, tener la mente vacía voluntariamente es muy difícil.

Fluttershy: disculpe señor royal, podría decirnos cómo fue que se conoció con las princesas, parecía que ustedes fueran muy cercanos.

Royal: a Tia la conocí cuando ella tenía más o menos 12 años, y luna 7 años. celestia era muy curiosa, muchas veces se metió a mi casa para ver qué cosas tenia; en una de esas oportunidades llevo a luna con ella para alcanzar cierto estante, ya que en esos momentos le costaba hacer magia de levitación avanzada (celestia se sonrojo al recordar eso, mientras pinkie y rainbow no podían evitar reír, al oír que su poderosa soberana era mala en la magia), no se burlen en esos tiempos era común tener problemas al aprender magia; ese día me quede en casa para saber quién desordenaba mis estantes, y al oír ruido me acerque con cuidado para ser oído por el supuesto rufián, estaba listo para atacar, pero no pude evitar reír al ver que celestia estaba sepultada bajo mis libros, y luna a su lado tratando de sacarla sin ningún resultado.

Narra royal

Royal: (aguantando la risa) oigan pequeñas se puede saber que hacen en mi casa.

Celestia: perdón, es que quería saber si es verdad que usted tiene cabezas de niños en frascos.

Luna: (casi llorando) por favor no nos saque las cabezas no queríamos hacer nada malo, yo ni siquiera quería venir mi hermana me obligo.

Royal: oye tranquila, no tengo cabezas de niños en mi casa, ¿dónde oyeron esa historia? (les pregunte mientras sacaba a celestia debajo de los libros)

Celestia: muchos en el pueblo dicen eso, y que por eso nadie viene a visitarlo, y los que vienen nunca regresan.

Royal: oye pequeña no creas todo lo que te dicen, si querías saber si era verdad debiste preguntarme, no entrar como un ladrón en mi casa.

Luna: (más calmada) entonces no nos acara las cabezas para ponerlas en frascos?

Royal: no pequeña, eso era una mentira (le dije en lo acariciaba su cabeza para calmarla); por cierto, ¿eran ustedes las que se metían en mi casa todo este tiempo?

Celestia: solo fui yo la otras veces, perdón por molestarlo y desordenar su casa, me dio curiosidad saber qué otras cosas tenia aquí.

Royal: si mal no recuerdo tú te llamas celestia (me lo confirmo moviendo la cabeza), bueno te gustaría que te mostrara lo que hay en mi casa.

El séptimo elemento de la harmoniaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora