Capítulo I
La verdad es que mi vida no es fácil, lidiar con los chicos del instituto, con mi madre queriendo lucir joven, después de dejar la actuación y separarse de mi padre y el queriendo aparentar que le importo, la verdad es que me importa una mierda, y puedo ser demasiado cruel con cualquier persona que se me cruce en el camino.
-aly, deja de maltratar ese cabello- emy casi me arranca la cabeza al tirar de mi gorro.
-oye déjame, me gusta. - grite tratando de quitarle mi gorra de las manos.
Mi amiga Emily luce como la típica niña bien y popular, para eso es la capitana de porristas.
Ponerme faldas o tacones no es lo mio, a menos que sea una salida formal o alguna cena con mis padres, vestir así, no me ayudara a sacar buenas notas, es más, seguramente solo me ayudarían a llamar más la atención, con lo mucho que me gusta eso, nótese el sarcasmo.-la verdad aly, no se como tienes a tantos chicos babeando por ti, osea amiga, te amo, pero esa forma de vestir, y tus hobbies solo atraen a chicos raros a tu lista de pretendientes- dijo ely con cara de asco lo cual me iso reir- de todos modos, a todos les dices no cuando te invitan a salir, que clase de chica hace eso.
-no me gusta, solo quieren salir conmigo por ser hija de una actriz reconocida, y de un empresario de mucho dinero, no quieren salir por ser quien soy- después de mi primer novio "formal" le dije no a la casi 10 chicos que intentaron invitarme a salir; mi madre siendo una actriz reconocida, me mantenía a la luz publica como la hija perfecta, cuando decidió dejar la actuación y solo dar clases en una escuela privada de actuación, mi vida tuvo un poco más sentido y mucha mas vida privada, aun así los chicos de la escuela solo me veían como la hija de una actriz, es patético, mi padre por su parte decidió dejar a mi mamá después de darse cuenta de que lo engañaba con su representante, fue el caos en mi vida, la separación, decidir con quien me quedaría, los paparazzis siguiendo a mamá, a papá, he incluso a mi, fueron los peores tres años de mi vida, ahora ya con 19 años todo iba un poco mejor.
-bueno Aly, te dejo, tengo que ir a ver a mi chico- se levanto Emily, estábamos fuera del instituto, tomando la hermosa sombra de un gran árbol, ojeando uno de los libros que tome de la biblioteca ayer antes de salir al almuerzo.
-esta bien Emy, ¿te veré en la salida?. -
-tal vez Aly, no se que planes tenga Tom, pero igual te mando un texto vale- me mando un beso al aire y se fue saltando como loca, es la típica niña bien, que todo mundo quiere, y de la que muchas tienen envidia, gracias al cielo es mi mejor amiga hace años, nos conocimos cuando teníamos aproximadamente 9 años en una fiesta de beneficencia en la que mis padres aun juntos fueron invitados, estuvo a mi lado desde entonces, creo que paso mas tiempo con su madre Clara y su papá Noel, que con mis propios padres.Después de darle unas cuantas ojeadas a el libro, mi celular comenzó a vibrar, era mi alarma para el horario escolar, normalmente me pasaba horas leyendo, tanto que perdía horas de clase por no darme cuenta del tiempo, así que puse alarma diaria al terminar la hora del almuerzo, tonto lo se, pero me pierdo en la lectura.
Apague la alarma, tome mi mochila que tenia a un lado, metí el libro y mi celular, tome mi patineta, que hasta ahora es mi único amor, y me dirigí a mi siguiente clase.
La clase gracias al cielo paso rápido, la maestra de biología cree que todo mundo sabe de lo que habla, la verdad es que no entendí ni una palabra de lo que decía en toda la clase. Mi único objetivo por el resto del día era ir de nuevo a la biblioteca, por un nuevo libro y entregar los tres que había pedido el día de ayer, claro que los libros son solo un pretexto para ir, creo que en la biblioteca de mi casa hay la misma cantidad de libros que en la biblioteca, lo único que me trae aquí es él.
Y ahí estaba, frente a la primer mesa al entrar, un chico no muy alto, de pelo algo largo color castaño, ojos miel, ocultos x esos lentes, vestido tan normal, unos jeans, playera negra, camisa a cuadros abierta, y unos clásicos converse, creo que más de una vez, me he quedado babeando cuando lo veo, el ni siquiera sabe que existo, recuerdo la primera vez que hable con él, solo me dijo, - esta en el pasillo cuatro- casi me derrito ahí mismo.
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El Bibliotecario
Teen Fiction¿Cómo el podría fijarse en mi? ¿como mostrarle que no soy una mierda, como todos creen? ¿cómo le hago ver, que en verdad puedo ser buena? ¿Qué solo espero al chico adecuado, mientras a los demás solo los ignoro? Eso no es malo, ¿o si?