- ¡Mierda! El despertador- Las 8:30
Ya llego tarde, como siempre.
Me dirigo al baño, lavo mi cara. Pintalabios, rímel ¡lista!
Cojo mi camisa favorita, junto a una americana de color azul marengo, ahora pantalones, doy saltitos para que me entre por el culo. Cremallera, botón ¡Ya!
Cogo mi mochila y salgo rápidamente para coger el tren.
¡Bien! He llegado a tiempo. Las puertas se cierran trás mis pies.
Me siento.Y ahí está, otra vez. Con su corbata, impecable, tan perfecto.
¡Mierda! Sus ojos se depositan en mi, y noto como la cara me arde.Ha llegado a su destino
Las puertas de la oficina se abren y veo a Elisabeth, mi mejor amiga.
- Empecemos
El señor Smith nos ha ordenado redactar un artículo sobre el accidente de ayer.
- ¡Vamos!- Oigo chillar desde el otro lado de la oficina a Damon.
- Vamos Sam, el será nuestro conductor- me afirma Elisabeth giñando un ojo.
Yo, ruedo los míos.Llegamos al lugar del crimen.
Lo observo todo, es una manía.
A lo lejos veo a Jack y Steisy, me dirigo a ellos pero Elisabeth hace que me pare en seco sujetándome del brazo y susurrándome al oído:
- ¡Sam, mira quien está ahi!
Y allí estaba... El chico del tren.
- Al parecer es el fotógrafo-Empiezo a andar, dirigiéndome a Jack y Steisy.
- Hola - Dicen al unísonoJack se acerca al chico del tren haciendo así que se acerque.
- Andrew, esta es Sam.
- Encantada - Y sonríe, haciendo que se le marquen esos asquerosos hoyuelos
-I-igualmente- Mierda, ¿porque soy tan torpe?
Su sonrisa se ensancha- Bien, veo que ya os han presentado, trabajareis juntos- Escucho decir al señor Smith.
Nota mental: no babear cuando Andrew esté cerca.