*Esto debe ser mentira. No me puedo creer que haya leído Dylan. Sabré sobre el chico del cual llevo toda la vida enamorada.*
Si Ann, claro que puedo. ¿A que hora voy?
Si? Perfecto. Pues, ¿que tal si vienes a las 7pm y te quedas a dormir a casa?
Vale, me va super bien!
Pues te veo mañana a las siete. Ah! que se me olvidaba, vendrá también el hermano pequeño de Dylan, se llama Tom, tendrá que estar con nosotras. No te molestara no?
*¿Que? ¿Que? ¿Que estará su hermano con nosotras? No me creo nada, parece que todo esto sea alguna broma que me estén haciendo. Esta tarde/noche hablando con mi grupo de amigas sobre él y ahora esto. Pero, la verdad, adoro esta broma, si es que lo es.*
No, no, tranquila. Hasta mañana!
Me levante de la cama y me fui a desmaquillar. Tarde mas de lo normal, aunque parezca raro, me hacia muy feliz saber de él y estar con su familia, aunque a él no lo viese. Luego me puse el pijama y me metí en la cama.
Dormí super bien, supongo porque sabia que el día siguiente iba a saber de Dylan, aunque Kelly me despertó a las 5 toda borracha y la tuve que ayudar a meterse en su cama.
Me desperté a la 1pm, como que ella aun seguía dormida le deje una nota diciéndole que me iba a casa y que cuando se despertase que me llamara.
Eran las 6:50pm cuando salía de casa para ir a la de Ann. Cuando llegue fui a dejar la bolsa en su habitación y nos pusimos a parar la mesa para esta noche mientras sus padres hacían la comida y nos preparaban dos pizzas.
Nosotras comimos antes de que llegaran todos los padres. Y hacia las 9pm-9:30pm llegaron todos, los últimos en llegar fueron los de Dylan. Cuando entraron y vi a su hermano, tuve que quitar la mirada de encima suyo rápidamente, no podía mirarlo. Cuando lo miraba me venían todos los sentimientos que tenia hacia Dylan de una manera muy fuerte, era una sensación rara la que sentía porque sentía como si me clavaran 50 mil cuchillos a la vez en el corazón. Y no entendía el porque me venían todos estos sentimientos tan fuertes con solo mirar al hermano del que estoy realmente enamorada, supongo que era porque se parecían tanto que era como si viese a Dylan en vez de Tom.
- Hola Ann y Cathy! - nos saludo Theresa, madre de Dylan.
- Hola Theresa! - le respondimos a la vez y le fuimos a dar dos besos.
- Tom, ¿vienes ahora con nosotras o te quedar aquí con ellos a comer y cuando acabes subes? - le pregunto Ann.
- Mejor subo después, que no he comido nada. - respondió Tom.
