Ciudad de México
En una habitación de la gran casa de la familia Navarro Leyva, la más pequeña de la familia estaba terminando su tratamiento del día.
- bien cariño, puedes salir a jugar- decía Anna una chica que venia a cuidar a la pequeña niña.
- ¡¡siii!!- dijo la pequeña, tenía unos 5 años y su voz aniñada lo demostraba.
Se veía que con ansias que quería salir, ella se dirigió al cuarto de su hermano.
- ¿Alan?- dijo entrando al cuarto del mencionado.
Este se encontraba estudiando, y al escucharla volteo a verla y sonrió.
- ¿pequeña que haces aquí?- se levanto y fue a su lado.
- quería ver si querías jugar conmigo- dijo con un pequeño sonrojo.
-claro- dejo los cuadernos en el escritorio que compartía con Ivan y salió con ella tomada de la mano.Aunque Alan tenga apenas 8 años el cuidaba como un padre a su hija, el y su primo siempre estaban con ella ya que el padre de los Navarro trabajaba tanto para olvidar el dolor que aun albergaba esa familia.
Al salir Anna estaba con la vecina en su pórtico, era una señora de avanzada edad y desde ahí vigilaba a los pequeños Navarro.
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- ¿Alan me compras un helado?- le pregunto con una sonrisa al escuchar el típico tintineo del heladero.
- claro, Freddy vamos- los dos niños se alejaron de la pequeña por ir por el anhelado helado para los tres.
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Eternamente
Fanfiction27 de Septiembre del 2007 Toda la vida me he preguntado el porque yo, siempre rodeada de hipocresía solo puedo confiar en mi hermano. O eso creía hasta que llego el...... ----------------------------------- Recuerden esta historia la estoy haciendo...