Soy su juguete (Jeff Y Tu) [[EN EDICIÓN]]

"Capítulo 4"

-Que agresiva... esto merece un buen castigo primor-. Las pupilas de mis ojos temblaban, no se como tenía planeado salir de esta dándole una bofetada!, pensé que esto tal vez arreglaría algo pero no, termine empeorandolo.

Jeff con su cuchillo me hacia uno que otro corte en los brazos, mas de los que ya tenía ;-; y los seguía lambiendo de una forma demasiado lenta, sentía su húmeda y caliente lengua limpiar la sangre que salía de mis cortes.
Jeff seguía aun así moviendo sus dedos en círculos en mi ciclosis, me dolía demasiado fue tanto así que di un laaaargo gemido de dolor.
Y después de eso, jamás olvidare ese momento.
Fue el momento que...perdí lo mas importante que tiene una mujer, mi virginidad.
Jeff había metido todo su miembro dentro de mi, doliendome en lo mas profundo y noble.
Yo no aguante tal dolor, lo sentía demasiado grande para mi.
Como nos encontrabamos sentados en medio de la cama y yo con mis puertas entrelazadas a su cintura.
Necesitaba recostarme o al menos recargar me en algo, este dolor no me permitía pensar e iba más allá de mi orgullo.
Tome a jeff con mis brazos y los entrelaze recorriendo todo su pecho hasta llegar a su espalda y empezar a rasgarla fuertemente, al momento de entrelazar mis brazos en su espalda me acerque más a el y me recargue en su pecho mientras gritaba y sollozaba a la vez, mis ojos se habían nuevamente empezado a llenar de lágrimas.
Jeff había entrado completamente su miembro a mi entrada, y en NINGÚN momento espero a que me acostumbrara a el, ya que el empezó inmediatamente a jadear algo fuerte, y empezó a entrar y salir de mi demasiado rápido.
Mis paredes vaginales se desgarraban y el jadeaba con más y más placer.
A mi aun me dolía muchísimo era esa clase de dolor que no lo soportas y solo quieres que termine ya.
Jeff al parecer estaba llegando al orgasmo cuando mordió mi hombro demasiado fuerte y no me soltaba de su mordedura, la mordida igual me estaba doliendo pero no tanto como el dentro mio.
Yo seguía con mis manos en su espalda tomando su camiseta en puños y en jalar los como una manera para aguantar el dolor.
Su camiseta ya la sentía muy mojada en mi rostro por todas las lágrimas que se me habían salido y Jeff seguía penetrandome cada vez mas fuerte y ondo, sentía como si su miembro iba creciendo con cada penetración y este se hacía cada vez mas y mas duro.
Me dolía demasiado mientras que en el no dejaba de jadear.

-MÍA, completamente MÍA-su voz sonaba más ronca y masculina que lo normal.
No me gustaba que dijera que era suya pero tenía razón, yo decidí acceder hasta aquí pero para proteger a mi familia.

Mi vista se empezaba a nublar, y creo que al parecer Jeff estaba llegando al clímax ya que soltó un jadeo muy grande.
Creo que Jeff tenía planeado sacar su miembro antes de eyacular dentro de mi pero soltó ese jadeo antes de poder sacarlo y de inmediato sentí un líquido exparsirse en mis paredes vaginales, este era cálido y acogedor aunque de cierta manera extraña.
Este liquido calmaba un poco mi gran dolor, no se porque pero me sonroje.
Solté un gemido callado por un delicado beso en los labios por parte de Jeff, jamás me había besado delicadamente y sinceramente algo recorrió por todo mi ser al momento de que me besara de esa manera.
Cuando se separo un poco de mi pude ver su rostro y... estaba levemente sonrojado.
Necesitaba ya cerrar los ojos, mi cuerpo se sentía demasiado extraño y cansado sin contar que el dolor aun seguía ahí.
Jeff aun no salía de mi y era lo que mas deseaba que hiciera así que intente seperarme de el para sacarlo pero solo conseguí lastimarme e hice una mueca de dolor.

-Cuidado, no intentes sacarlo tu, te lastimaras...-me sonroje demasiado cuando jeff me había hablado de una manera tierna.
El me había hablado tiernamente y eso era extraño ya que hace un momento tenía lujuria en sus ojos. Ahora que lo mire a los ojos los tenia azules, era un Azul muy claro y brillante, un Azul que me gustaba...
Jeff cuidadosamente empezó a sacar su miembro muy lento y despacio haciéndome soltar un gemido algo largo y débil y fue al mismo tiempo que el gimió.
Cuando el salió dentro de mi me tomo y me recostó lentamente en la cama.
Yo ya no podía resistirme, necesitaba dormir y eso hice.
Al cerrar mis ojos sentí como me cubría con unas sábanas y depositaba un delicado beso en mis labios antes de escuchar como se vestía y cerraba la puerta después.
Eso fue antes de quedar profundamente dormida.