Keep mys Dreams

¡Lo mato!

Escuela. ¡La odio con todas mis fuerzas y todo mi ser! En especial por matemáticas, no entiendo por qué razón, motivo o circunstancia de la vida, no la entiendo; no me cabe en la cabeza. Ya de camino a la cocina, mi hermano, tan respetado como siempre, me hace el desayuno -nótese el sarcasmo- simplemente puso el pan y la nutella sobre la mesa; y yo que me la averigüe.

Después de desayunar, me vestí con una falda negra 3 dedos sobre la rodilla, una blusa verde acua y unos botines negros con mi cabello suelto como siempre. Salí y me fui con Matt  en su auto; cuando llegamos dijimos lo mismo que siempre acostumbramos:

-No te conozco de ningún lado- y dicho esto, cada quien siguió su camino.

Cuando llegó a mi casillero, en ese mismo instante llego mi mejor amiga, mi hermana, una de las pocas personas que me acompaña en mis locuras, mi gran amada "Olive".

-¡Hello my friend!- aún no me soltaba de su asfixiante abrazo.

-¿Qué tal Olive?¿por qué tan cariñosa hoy?

-Solo te abrazo, tampoco es para que te creas tanto-blanqueo sus ojos- y tu ¿por qué tan gruñona hoy?

-No había chocolate esta mañana ¿lo puedes creer? El inútil e inservible de Matt se lo acabo todo... Juro que un día de estos no respondo a mis acciones .

-Ya tranquila bestia, si quieres vamos a mi casa después de clase, hay mucho allá.

-Bueno, vamos a clase, deja que vaya a mi casillero -asiente con toda la normalidad que ella no posee, muy bien es hora de empezar el interrogatorio.

-¿Qué te pasa? Te noto bastante extraña.

-No, ¿qué dices? Si estoy tan normal como siempre.

-Si bueno, vayamos al salón- cierro la puerta de mi casillero y dicho esto, comenzamos a caminar rumbo al salón de biología.

Cuando entramos, el profesor aún no había llegado y hay muy pocos alumnos ; yo me dirijo al final del salón y al lado de la ventana con Olive a mi lado. No sé porqué pero no me creo que Olive este bien, algo me dice que le ha pasado algo y no me voy a quedar así, lo voy a saber ella quiera o no.

- Ya, me dices ahora o me dices luego, pero de que me cuentas me cuentas.

-Vale, te digo ahora- yo asiento para que prosiga- llegué temprano al colegio y encontré a Connor casi atragantando a Mía con su maldita lengua y lo peor es que no me vieron y cree que no sé nada.

Ya! Lo mato, haré que desee jamás haber nacido para no tener esta desgracia de vida que le haré tener, se arrepentirá de lo que le hizo a Olive, le haré pagar. Y creo que ella nota mis intenciones ya que niega con la cabeza y me hace mirarla a los ojos, y es ahí cuando notó que tengo mi ceño fruncido y los puños apretados. Pero no me importa, no me va a persuadir. Me voy a vengar y me voy a dar el gusto. Esto va a ser genial.

-¿Estás bien?

-Si, tampoco es para tanto, por lo menos me di cuenta del patán que era, antes de acostarme con él.

-Si, eso sí hubiera sido malo- y dicho esto, el profesor inicia la clase.