-¡Mama! ¿Que vamos a almorzar hoy?- le pregunte mientras estábamos desayunando antes de salir para el colegio.
-No se Paula, veré que hay en el refrigerador. -me contesto desde la cocina, con su voz que dejaba ver, lo cansada que estaba aun.
-¿Podemos comer canelones con salsa blanca y esa salsa roja que tanto me encanta? Ya sabes, gratinados al horno con queso.- le pregunte dejando en evidencia mi gula.
-Mm mm, esta bien, lo que tu quieras princesa.- me respondió, siempre tratando de complacerme en todo, hasta lo mas mínimo.
-Gracias mama, te amo.- me pare de mi silla, corrí hasta la cocina y la abraze- Nos vemos a las 12:30, supongo que a esa hora estaré llegando. - me gire en mis talones para agarra mi bolso.
-Esta bien mi cielo, mandame un mensaje antes de entrar al colegio para saber si llegaste bien.
-Lo haré- dije antes de cerrar la puerta de calle.
Mientras me dirigía hacia la parada de colectivos, pensaba en toda la tarea que tenia que entregar mañana. Pase por un local y vi mi reflejo en el vidrio ¡Oh por dios! Me pregunto ¿cuanto habré engordado en el ultimo tiempo?
Yo no soy una chica divina, soy un poco petiza, por lo que siempre uso plataforma en todo, por eso nunca uso zapatillas, mido 1,54 m. No es una obsesión, tampoco odio mi estatura, si fuera mas alta, no podría usar todas esa divinas botas de taco "chino", mi favoritas por que tienen altura,pero no son tan agresivas a simple vista.
Tengo el pelo largo me llega hasta la parte superior de mis muslos. Es de color castaño, ondulado. Siempre tato de tenerlo divino. Mis ojos son un poco pequeños, lo que mas me gusta de mi cuerpo son mis pestañas, largas y curvadas. Siempre trato de resaltarlas lo mas posible. Jamas olvido de delinearme, y ponerme mascara de pestañas. Todos siempre me preguntan si uso pestañas postizas, y su envidia se refleja en sus rostros cada vez que les contesto que son mías. Por otro lado están mis cachetes, soy demasiado cachetona, desearía que mis cachetes no fuesen tan gordos. Y ahí esta, mi nariz. Mi nariz no es hermosa, es diferente, pero tiene linda forma. Mi boca, es una boca mediana. Es linda me gusta cuando me pinto de rojo. Y la forma que tiene cada vez que sonrió dejando ver mis dientes. Gracias a dios nunca tuve que usar aparatos y los tengo casi perfectos.
Mi torso, bueno... No tengo cintura y me estoy poniendo gorda. Mis piernas por suerte son normales, no son flacas, tampoco son gordas, lo que me sorprende viéndolas en relación a mi torso. Mejor dicho a mi panza.
La ultima vez que me pese pesaba 56 kilos ¿Esta bien 56 kilos para 1,54 m con 16 años ? Yo creo que no. Pienso que tendría que pesar 50 kilos ¡Pero que mierda! Con todo lo que me gusta comer, y con lo rico y delicioso que cocina mama.
Pero que mierda acabo de pasar por un kiosco, no agarre mi barrita de cereal del kiosco de mama y papá. Que tonta, me olvide.
Me volví hacia el kiosco por el que acababa de pasar y toque timbre. Salio una señora a atenderme.
-Hola buen día- me saludo en un tono dulce.
-Buenos días, emmm ¿Tiene barritas de cereal de sabor frutilla?- le pregunte a la señora. En ese momento vi ese alfajor triple, tipo mini-torta. Mmmm que rico, se ve tan delicioso.
-Si, ¿Quieres una?- me pregunto la mujer interrumpiendo mi pensamiento.
-No, mejor deme ese alfajor- le dije casi sin pensar en lo que estaba diciendo.
Me dio el alfajor y yo le pague. Lo miro, le doy la vuelta al paquete y busco la "información nutricional" ¡TRESCIENTAS CINCUENTA CALORIAS! Oh mi dios. Pero ¿Que carajos? Ya lo compre y lo quiero comer y eso voy a hacer, me lo voy a comer. Lo abrí y comenzé a comerlo mientras llegaba a la parada de colectivos.
Cuando llegue al colegio, antes de entrar le mande el mensaje de texto a mama. Guarde mi celular en mi bolsillo, y atevece el portón de entrada. Me dirigí hacia la formación, y ahí estaban... Mis amigas.
