Capítulo único

95 12 5
                                    


Veía su pálida figura a través del gran espejo de su cuarto, un chico con unos ojos ámbar casi amarillos, con el cabello tan negro como la noche misma, era el chico más hermoso que ella hubiera visto.

Hace dos años ya que lo veía, él nunca hablaba, sin embargo mientras ella no lo veía él le dejaba mensajes escritos con su propio lenguaje con un color rojo carmesí que recorría todo el espejo.

Solo podía verlo de esa manera... por medio de su propio reflejo en el espejo viejo y roto que se encontraba en su habitación. ¿Quién iba a imaginar que ella terminaría perdidamente enamorada del mágico chico que veía en lugar de ella misma?

"Él no es malo" se repetía en sus pensamientos cálidamente mientras miraba con atención los movimientos del hermoso chico, "Es un ángel, no es malo" se dijo convenciéndose a ella misma mientras cortaba una de sus muñecas para luego colocar un poco de su sangre en el espejo, como según él en un dibujo primitivo le dijo que ofrendara para que pronto el pudiera salir de su prisión en el mundo de los muertos y regresar al de los vivos junto a ella.

Sin embargo, las intenciones del chico no eran esas...

Con las gotas de sangre que día a día la chica le daba, él se volvía más fuerte y muy pronto no tendría que usar a la enamorada adolescente.

Hace dos años que ella y sus amigas se habían reunido en su casa a "llamar a los espíritus", escucharon una voz rasposa y baja preguntando a quien de ellas podría tomar y todas lloraban pidiendo piedad por favor, mientras ella solo susurraba casi inaudiblemente sin cesar "recházame...", nada raro había pasado, hasta el día siguiente cuando él apareció en el espejo de la habitación, desde un inicio a ella no le había asustado el hecho de no ver su reflejo, desde que lo vio fue impactante como la frase "amor a primera vista" le caía como anillo al dedo.

Ella había salido a la escuela aquel día, un día en el que la lluvia caía como si de piedras mismas se tratara contra los techos de la ciudad.

Era momento para planear el cómo salir de su prisión eterna.

En su ausencia, el chico se adentró en los confines del inframundo en búsqueda de una vieja bruja la cual había conocido milenios atrás.

-La chica se ha enamorado de mí, me lo ha confesado ayer justo como me lo habías dicho.-

La anciana se cruzó de brazos.

-¿Te ha dado de su sangre a como habíamos acordado?-

-Así es... le he dicho que era para que pudiera salir del espejo y quedarme la eternidad junto a ella, se lo ha creído a la primera.

-Perfecto, eso hará mi hechizo aún más fuerte.

-Aun no entiendo como lo harás. – espetó el muchacho sentándose en una roca.

-Calma mi muchacho esto es lo que vas a hacer si es que quieres volver a ser humano: convencerás a la chica de que su última oportunidad de estar juntos es que ella se suicide, no sé cómo lo harás pero esa es tu única esperanza...

-¿Cómo esperas que ella me haga caso?

-Me has dicho que está enamorada, si realmente lo está lo hará, los jóvenes cometen muchas estupideces por amor.

-¿Y cómo sabrás cuando lo haga?

- Estaré escuchándolo todo desde donde ella no pueda verme, cuando su sangre empiece a correr, yo empezare con mi hechizo junto con una bruja la cual vive en su mundo.

Rechazame.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora