¿Dónde estamos?

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Frenaron el auto y la sacaron a la mujer del auto, tuvieron que salir porque se acercaban los zombis y se adentraron en el bosque. Se pusieron a descansar y otros hacían guardia.

- Dónde  estoy? - se pregunta Rose a si misma.

- En el corazón del bosque, creo que estamos perdidos. - le responde  Thomas con una mano en la cabeza.

Empezaron  a despertar  a los demás  en vos baja, pues  no sabían  quién estaba  por allí. A demás  todos  tenían heridas  por  las que tenían mucha sangre.

- Caminemos lentamente a ver  si encontramos algún lugar, ya casi oscurece  y no sabemos  ni donde estamos. - dice Rose al pequeño  grupo.

Luego de un largo viaje a pie todos cansados y hambrientos, encontraron una enorme casa de campo.

- Corran! Vamos todos allí. - invitó Maryline.

- Es una casa de campo? Pero si aún estamos en la ciudad. - dice Jessica a si misma.

- No puedes hablar  en tu mente estrellita? - pregunta Rose mientras camina.

- ¿Y tú puedes dejar de meter las narices en donde no hay mal olor? - le preguntó Jessica con descontento.

- No entendí nada pero, está bien. - ella le responde.

- Silencio, estamos llegando. - dijo Jared en el frente.

- Parece que aquí  hay gente. - Jessica  responde.

- Toc, toc, toc. Toca Johnny  la puerta.

- ¿Puedes hacer más ruido la próxima vez Johnny? - le pregunta Luisa al volver a tocar.

- ¿quién anda allí? - una voz masculina pregunta.

- ¿Pueden abrir la puerta  por favor? Empiezan a llegar unos cuantos amigos. - dice Rose  muy nerviosa.

-Lárguense por donde mismo han llegado. - responde otra voz.

- Oiga, necesitamos Ayuda, esto acá no pinta nada bueno. - grita Thomas tocando la puerta.

- Ya dije que no! Mejor váyanse  antes de que esos putrefactos se acerquen. - responde el hombre.

- ¿Putrefactos? - pregunta Luisa.

- Por amor a Dios! Abra esa puerta! - exclamó  Jessica con cara de desesperación.

- Tío, abre la puerta ya, no los dejaremos ahí fuera, de ninguna manera. - gritó la voz anterior.

El hombre abrióla puerta.

- Revísenlos, no vaya a  ser  que uno de ellos esté mordido. - dijo el tío al cerrar la puerta.

- A la mierda ¡miren! apuntó  Jared  hacía  fuera.

Venían  miles de zombis. Quizás pudo ser el olor de nuestra sangre la que los atrajo. - dijo Luisa mirando a Thomas.

- Erick! - gritó el tío.

- ¿Sí José? - preguntó Erick.

Zombie apocalypse.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora