Efectos secundarios

102 15 4
                                    

Viaje inesperado

Mi primo estaba por llegar. Venia desde Medellín, no a más de 4 horas en carro de mi casa, ubicada en Manizales. Estaba nervioso puesto que lo había visto 1 vez en toda mi vida y por si fuera poco, era unos 3 años mayor que yo, por lo que no estaba seguro que tuviera gustos similares, por consecuente, no nos la llevaríamos bien, o al menos tenía ese presentimiento, que era más bien una suposición muy realista inclinándose a lo negativo.
No era lo único que tenía en mente en ese momento pero la inseguridad de, en que terminaría todo esto me tenía en últimas preocupado.

Mi primo venia de Australia y hace unos cuantos años lo había visto únicamente a travez de skype gracias a mi tía que quería que nos conociéramos, pero no me cuestioné mucho a mí mismo en ese momento en cómo sería mi relación con él llegado el caso que nos conociéramos, lo cual no veía ni como una posibilidad. Ahora mis sentimientos sobre ese tema eran en un caso extremo, ansiedad.
Cuando llegó por fin el momento me encontraba dormido. Esperarlo hasta las 2 de la mañana después de estar acostumbrado a madrugar no había sido fácil y no era una tarea con la que esperaba que me fuera bien.
Cuando desperté estaba muy confundido y no estaba muy seguro de lo que había sucedido y lo que estaba sucediendo, tanto fue así que decidí volver a dormir. Al parecer mi primo tenía sentimientos parecidos puesto que la única vez que nos habíamos visto, aunque no fue mucho tiempo; nos la habíamos llevado a mi parecer bien y me parecía una persona simpática y fácil de manejar. Dado que él se llevó la misma impresión sobre mí estaba igual de ansioso que yo y decidió despertarme, acto seguido decidimos salir al balcón puesto que él quería observar la calle, me contó sin mucho animo después de sus 4 horas de viaje nocturno que en Australia era muy diferente y le gustaba apreciar las calles tercermundistas. Para no decepcionarme de mi país decidí tomar por asentado que no eran tan feas y que debido a que era su primera ves fuera de su país no estaba muy acostumbrado a ver otras culturas.
Indirectamente, no recuerdo muy bien como, me logro preguntar luego de muchos tapujos que si alguna vez había probado la mariguana o si alguna vez había pensado en hacerlo. La pregunta logró volver un poco incómoda la conversación seguido de unos segundos de silencio.
Nunca había tenido un primo contemporáneo, o sea también adolescente al igual que yo, con el que platicar y contarle cosas guardadas que tenía acerca de la pubertad dado que mi papa no era muy cercano a mí y mi madre no era la mejor opción para hablar sobre aquello. Por esto al preguntarme eso decidí ser sincero y decirle que en alguna ocasión, más tarde que temprana, me gustaría probarla. En realidad pensaba que era una manera de decirme que él la había probado y le había gustado, por eso había respondido eso y aunque no era mentira, no era completamente verdad, pues tenía presupuestado probarla pero en un momento preferiblemente lejano.

Para mí infortunio no fue así, y de echo, tenía en su maleta un cigarrillo pero no exactamente eso, lo conocía más con el nombre de porro.
En un momento llegue hasta ponerme nervioso. Pero después de platicar un rato decidí llamar a mi vecino para que se asomara al balcón de la casa de él, el cual era aledaño al mío, tanto así que estirando el brazo lograba tocar su ventana. Decidí hacer esto puesto que el sabía de eso, por lo que me había enterado. En ese momento, si no estoy equivocado el ya estaba en 11 del colegio, el cual no era el mismo mío. Yo a duras penas cursaba octavo, recuerdo que ese año lo perdí.
Una vez se asomó y le presente a mi primo, decidimos mostrarle el elemento que nos tenía cuestionándonos a ambos, y que nos dijera el que pensaba sobre aquello y gracias a que estaba experimentado, que nos ayudará.

-Uy, ¿eso es lo que creo que es?
-Me lo vendieron por 10 mil pesos- respondió mi primo con lo que prosiguió- me dijeron que tiene muy buena calidad.
-Muestre yo lo huelo- mi vecino coge el porro y se lo pasa por la nariz haciendo un gesto como de satisfacción- ¿dónde lo consiguió?.
Mi primo después de intentar explicarle por un largo rato el lugar pues no conoce mucho del país en el cual reside logra explicarle el lugar donde se efectuó la compra.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Mar 30, 2016 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Crónicas de una realidad alteradaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora