El Chico del Piso 2 (Alonso Villalpando)

Capítulo 13: Candy Crush.

Nos encontrábamos en la cama de Alonso, estaba recostada en su pecho mientras él acariciaba mi cabello...

Me cansé de llevar las cosas con calma, veamos cuán malo puedes ser bebé.

Pasé mis manos debajo de su camisa, delinee cada rincón de su bien trabajado abdomen, hasta llegar a su pecho, logré deshacerme de ella.

Me miró, pero esa mirada era diferente, llena de Lujuria, pasión, pero sobre todo, amor.

En un rápido movimiento se encontraba encima de mí, besando, o mejor dicho, devorando mis labios...

Gemí al sentir un leve dolor en mi labio inferior, Alonso me había mordido, pero eso no impidió que siguiera con lo que hacía.

Bajó a mi cuello y dejó varios besos húmedos en el, algunos mordiscos y más...

Lo único que podía hacer era Gemir, Alonso tenía el control de mi cuerpo en estos momentos.

Tomó el borde de mi camisa y lo subió por encima de mis senos, acarició mi abdomen sin dejar de besarme

Subió, subió, siguió subiendo, le faltaban milímetros para llegar a mis pechos.

"Is it too late now to say sorry,
Cause i'm missing more than just your body..."

Una llamada hizo que rápidamente Alonso se separara de mí, tropezara con sus zapatos y terminara en el suelo.

Mordí mi labio para evitar reírme, sentía un leve dolor en el por el mordisco de Alonso.

El móvil seguía sonando, en un ágil movimiento llegue a la mesa de noche y tomé el celular

-¿Bueno? -Pregunté mientras contestaba-

-Help me. -Dijeron al otro lado de la línea-

-¿Pam? -Pregunté- ¿Qué sucede? -Me alarmé-

-Tranquila, estoy bien. -Dijo al notarlo- Es que... Necesito que vengas a mi departamento ahora mismo. -Suplicó-

-Está bien, llego en unos minutos. -Colgué-

Miré a Alonso y el me miraba con cara de cachorro.

-Alon, tengo que irme. -Sonreí inocente-

-Pero...

-Te debo dos, adiós. -Acomodé mi camisa, besé sus labios, tomé mis cosas y salí-

Caminé hasta el elevador, marqué el piso 4.

Llegué al departamento de Pamela y toqué la puerta.

Uno,

Dos,

Tres toques y nadie abre.

Algo vibra en mi jean, tomo mi móvil y leo un nuevo mensaje.

"Está abierto ._.  -Pamela"

Tomé la manilla, la giré y efectivamente si, estaba abierta.

Entré y busque a Pam en la sala, en su cuarto y no pude encontrarla.

-Estoy aquí. -Gritan al otro lado de una puerta al final del pasillo-.

Caminé hasta la puerta e intenté abrirla.

-La llave azul. -Me indicó-

Busqué en el colgador y tomé la llave azul, la introduje en la puerta y la abrí.

-Al fiiiiin. -Dijo saliendo del ¿Baño?- Gracias ______. -Me abrazó-

-Pam, ¿Qué hacías encerrada en el baño? -Reí bajo-.

-Es que... Cerré por fuera y me quedé encerrada. -Carcajeó-

-Espera, ¿Cómo tenías tu móvil en el baño?.

-Candy Crush es mi mejor amigo cuando necesito hacer del dos. -Rió-

Me uní a su risa, estábamos muy a gusto, cuando Pamela se queda mirándome fijamente y de imprevisto deja de reír.

Por ende también hago silencio, hasta que ella habla.

-_______, ¿Que tienes en tu cuello? -Preguntó-

Mierda.

-Emmh. No tengo nada. Pff. -Me excusé-

-Vamos, no soy tonta, y... En tu labio también. -Hizo una mueca- NO. -Abrió exageradamente los ojos y tapó su boca con sus manos- TE ACOSTASTE CON ISAAC. -Gritó, prácticamente.-

Mierda x2.

-Pamela, claro que no. -Negué-

-A caso me dirás que esos son paquetes de mosquitos y lo de tu labio de lo hiciste con el piso. -Dijo irónica-

-No. Agh. Me refiero a que no me acosté con Isaac. -Rodeé los ojos-

-Pero... ¡Te acostaste con alguien! -Subió y bajó las cejas-.

Mierda x3.