The First Time When I Meet You

3.6K 292 88
                                    

Marinette. Mi linda y dulce Marinette. Amable, comprensiva y atenta con los demás, fue por eso y muchas razones más que me enamoré de ella. Mi dulce corazón.

Ella se encuentra sentada en su lugar, el cual está a un asiento más delante de mí. Se encontraba de perfil conversando con su mejor amiga. Su hermoso cabello azul oscuro atado en dos pequeñas coletas, sus mofletes redondos y rosados, sus ojos azules como el mismo cielo y sus labios rosas. Simplemente hermosa.

A pesar de lo que pasó en mi cumpleaños, no puedo odiarla. Aunque sí estuve un poco molesto, no puedo odiarla porque la amo con todo mi corazón.

Comprendí que lo hizo para ayudarme y me sentí mal al compararla con Chloé. Mi Marinette ni de lejos se parece a esa rubia mimada.

Marinette es mi musa, mi inspiración, la dueña de mis sueños. No hay día en que no dibuje su hermoso rostro, o su adorable sonrisa, es la primera persona por la cual he sentido esto. Me sonrojo de la pena con sólo recordarla, realmente me gusta mucho.

Recuerdo perfectamente lo que pasó el día en que hablamos por primera vez y lo amable que había sido conmigo ese día. Fue en ese momento cuando me enamoré de ella.

La primera vez que la vi entró por el salón acompañada por Alya, una compañera de clases. Ese día, Chloé había pegado un chicle en su asiento solamente por diversión, la verdad me pareció algo muy cruel pero no tenía el valor para decirle lo que pensaba.

El chico nuevo trató de quitar el chicle del asiento de Marinette, pero ella entró malinterpretando las cosas. Me dio un poco de rabia el ver, que por culpa de Chloé, habían culpado a ese chico.

En ese momento Marinette no me gustaba, aunque me pareció una chica muy linda cuando la vi. También me di cuenta de que tenía actitud al encarar a Chloé y no permitir que hiciera sentir menos a todos los de la clase, fue algo que realmente me gustó de ella, el que nos defendiera.

Pero, me enamoré de ella unos días después de que habían comenzado las clases.

Como todos los días solía dibujar con tranquilidad, dibujaba cualquier cosa que viniera a mi mente, algo que me inspirara y quería mantener grabada en un dibujo. Plasmar esa inspiración en papel.

Sin darme cuanta de lo que realmente dibujaba en esa ocasión, había hecho un retrato de Marinette. Al acabar de dibujarlo lo miré, me sorprendí un poco al verlo, pero luego sonreí y lo guardé en la carpeta verde que siempre traía.

Esa chica realmente me había inspirado.

El timbre que indicaba la salida resonó por los pasillos, guardé mis cosas en mi mochila, exceptuando la carpeta verde en donde guardaba mis dibujos. Las personas salían del salón mientras yo terminaba de recoger. Al final tomé la carpeta y me dispuse a salir del salón de clases.

Me encontraba tranquilo caminando hacia la salida, pero algo se interpuso en mis pasos provocando que cayera al suelo y todos los dibujos de mi carpeta se esparcieron por el suelo.

Miré lo que había provocado mi caída, resultó siendo Chloé quien había metido pie para que me tropezara. Ella reía, burlándose de mí.

Me reincorporé apoyándome en mis rodillas dispuesto a recoger mis dibujos, pero vi como Chloé pasaba encima de ellos pisando mis dibujos y ensuciándolos. Nadie quiso ayudarme, o eso pensé antes de que viera una silueta ayudarme a recoger mis dibujos.

Alcé la mirada para ver de quién se trataba, encontrándome con unos hermosos ojos azul cielo y cabellos azul oscuro. Marinette me ayudaba a recoger mis dibujos con calma y sacudiendo los que estaban sucios. Yo sonreí ante ello sintiendo un pequeño calor en mis mejillas.

Iba a recoger el último dibujo, pero sentí un tacto suave en la palma de mi mano, era la mano de Marinette. Sentí un pequeño escalofrío al sentir su mano tocar la mía, fue como si mi cuerpo se estremeciera.

Ella tomó el dibujo examinándolo, se trataba del dibujo que hice de ella hace un rato.

Me sonrojé y agaché la mirada apenado por ello. Me sentía realmente apenado por eso, tal vez pensaría que soy raro.

Volteo hacia ella encontrándome con sus ojos azules y con una cálida sonrisa plasmada en su rostro, mientras sostenía mi dibujo cuidadosamente.

— ¿Lo dibujaste tú? — Me preguntó con una voz amable y animada mientras me devolvía los dibujos que me había ayudado a recoger, pero manteniendo el dibujo de ella en su mano.

No pude responder, las palabras estaban atoradas en mi garganta, me sentía muy nervioso ante su presencia, por lo cual solo me limité a asentir.

— Tienes mucho talento, este dibujo es hermoso — Dijo sonriendo alegremente mientras miraba con admiración el dibujo que hice de ella.

Yo me sonrojé más ante sus palabras, mientras sentía mi corazón palpitar rápidamente, golpeando fuertemente contra mi pecho. Desvíe la mirada sonriendo un poco ante su halago.

— ¿Puedo conservarlo? — Me preguntó.

Volteé a verla sorprendido, ella mantenía su amable sonrisa.

— ¿D-De verdad lo quieres? — Pregunté un poco incrédulo y con voz un poco tímida.

— Por supuesto, realmente me gusta este dibujo. Me hace parecer bonita, aunque sólo sea una chica normal — Dijo rascando un poco una de sus mejillas.

— ¡P-Pero tú eres bonita! — Exclamé.

Ante esas palabras me sonrojé y desvíe la mirada. Ahora sí debía pensar que soy raro.

Ella me miraba sorprendida, la sonrisa de su rostro desapareció y cambió a una expresión incrédula. Después de unos segundos sonrió nuevamente.

— Gracias por pensar eso de mí — Dijo sonriendo — ¿Y sí puedo conservarlo? — Preguntó.

Asentí como afirmación.

— Cuidaré muy bien de él, lo atesoraré — Sonrió después de decir aquello.

Se puso de pie y me extendió su mano, yo la tomé ayudándome a levantarme. Su mano se sentía cálida por lo cual sentía mis mejillas muy calientes.

— Me llamo Marinette — Se presentó antes de soltar mi mano mientras sonreía.

— Nathaniel — Dije simplemente otorgándole una sonrisa tímida.

— Es un placer Nathaniel — Me dijo con un tono amigable — Debo irme... Hasta mañana — Dijo antes darse la vuelta y caminar a la salida.

— Hasta mañana — Pronuncié al verla alejarse.

Después de ese día solía dibujarla con frecuencia, no podía sacarme de la cabeza sus hermosos ojos azules como el mismo cielo, ni su adorable sonrisa o sus cabellos azulados.

Marinette siempre era el centro de cada una de mis obras, me gusta mucho dibujarla, pues ella es mi musa, es la única inspiración que tengo, es lo único que realmente me inspira.

No puedo odiarla, aunque ella me haya mentido en mi cumpleaños, pero realmente buscaba ayudarme y fue lo que no pude notar en ese momento. Aún le debo una disculpa por haberla comparado con Chloé y por no apreciar la ayuda que trató de brindarme, tengo miedo de que no me perdone.

Miro hacia su dirección, ella me mira mientras me sonríe, yo le sonrió de vuelta con timidez.

Estoy muy enamorado de Marinette Dupain-Cheng, me gustaría poder gritar esas palabras a los cuatro vientos y que todos sepan cuanto la amo.

Espero poder encontrar el valor suficiente para decirle lo que siento, tengo la esperanza en que algún día podré estar a su lado.

🎉 Has terminado de leer The First Time [One-Shot] (Marinette x Nathaniel) 🎉
The First Time [One-Shot] (Marinette x Nathaniel)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora