Capitulo 3:

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Renata:

Estaba ya por salir de la universidad. Todo el día la e pasado sola. Son las 12:34 de la tarde, y mis amigas no se han aparecido, son tan buenas por qué saben que prefiero quedarme sola un buen rato.

En el camino me encontré con Max, el chico más popular de la escuela. Y no es por ser la superior ni nada de eso, pero entre comillas le gusto, pero jamás le haré caso a un hombre de lo que resta de mi vida jamás.

-Hola Baby.- dijo odio que me llame así

-Mi nombre es Renata, si no te cabe en esa cabecita, dímelo para hacértelo entender.- me estaba alterando así que decidí seguir mi camino

-Espera, Rena...tengo que, decirte que, creo que ya lo sabes pero, me gustas y...- no termino lo interrumpí mirándolo seriamente y contestando un no

-No, yo no creo en ustedes los hombres, nos traicionan, los odio los detesto...y jamás óyelo bien jamás tendré a alguien.- conteste a lo que creo me preguntaría

-Con permiso tengo que irme.- dije volviendo a mi camino

-Baby, espérate.- lo ignore y corrí a mi auto

Tengo que escapar de ese invesil, tiene que entender que no quiero nada de él, jamás y nunca ni con él ni con ningún hombre.

Me monte al auto y lo acelere, dejando humo por todas partes.

Cuando al fin llegue a mi lugar favorito...aparque en un lugar donde nadie lo viera y baje. Pude sentir la arena seca, y poco a poco el agua.

¿Porque todos creen que pueden conquistar a una mujer como yo? Y luego dejarnos tiradas.

Cuando sentí el agua en mis pies, lo único que pensaba era en cómo deshacerme de ellos, o como yo salir de ellos. Pensé y pensé mientras que estaba en el agua ya.
Decidí y lo que decidí fue algo que...no pensé.

Desconocido

Iba por el mar con mi tabla de surfista en manos. Cuando vi algo, era parecido a una mano. Me acerqué, ya se estaba retirando mucho. Me sumergí al agua y lo que vi no me gusto.

Vi a una chica ahogándose. Me acerque hasta tenerla en brazos y poder saber cómo salir.

Pasaron casi 3 minutos ya que estaba muy retirada.
Coloque a la chica en la arena y comencé a darle en el pecho en forma para que saque agua y reaccione.

-Chica, reacciona.- digo pero nada

-¿Porque hiciste eso?- preguntó pero nada

-Tienes que reaccionar, por lo que se ve eres una chica muy linda así que arriba.- esta vez dándole respiración de boca a boca y ahí reaccionó tose por unos segundos y luego me ve

-¿Qué pasó?- pregunta después de casi 10 minutos sin reaccionar

-Te estabas ahogando ¿no sabes nadar? ¿O te lanzaste para matarte?- preguntó y ella se dedica a mirar el piso

-No te conozco, eres...eres un hombre y tú, tú eres malo, adiós.- dijo pero la sostuve

-Si soy un hombre, me llamo Alberto, y ¿porque soy malo?- contestó cada una de sus preguntas que en realidad no eran preguntas

Ganar tu corazónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora