Segundo capítulo

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Ayer como bien dije quedamos y no se solucionó todo. Así que hoy he quedado con ella para hablar por teléfono espero que sea una buena conversación y todo se arregle.

Conversación telefónica con Alice:

-¡Hola! Qué ganas de hablar contigo. - empecé la conversación eufórica.

- Ni te cuento, en verano te he estado llamando y no has contestado ni una vez. - Me dijo.

-Haber no he podido contestar por lo que le sucedió a mi abuela y por qué me metí en algunos problemas y ya sabes cómo es mi madre, me quito el móvil. - Le contesté muy seria.

-Yo habría hecho cualquier cosa para contestar a tus llamadas. - Me dijo en un tono desesperado.

-No sabes lo que he intentado poder hablar contigo, otra cosa es que no me hayan dejado, así que no hables si no tienes ni idea. - Le conteste.

-¿Perdón? No podías haber llamado por otro teléfono. Si yo tuviera que llamarte hasta le pediría al vecino un teléfono! -Me dijo en un tono chillón.

-No empecemos, por favor, no quiero discutir. No sabes lo mal que lo he pasado yo y ni si quiera sabes si he intentado contactar contigo. - Dije intentando calmarme.

-No, no se lo mal que lo has pasado, pero seguro que peor que yo no. Tú no sabes lo que es que tu novio te diga que es gay, y que todo este tiempo te haya estado utilizando.

-Bueno... Puede que yo no sepa lo que es haber tenido un novio gay y haber sentido tanto por él. Pero tú ni si quiera sabes lo mal que lo he pasado yo con el tema de mi abuela. ¡Así que te callas! - Le contesté alzando la voz.

-¿Que me calle yo? ¿Pero tú te escuchas?

-Claro que me escucho, mejor de lo que tú me escuchas a mí.

-Este verano ha sido el peor de mi vida y tú no has estado ahí.

-¿Acaso te piensas que el mío ha sido el mejor? Pues te equivocas, no quiero discutir. Así que mañana nos vemos. - Dije a punto de llorar.

-Esto es muy importante y tú quieres terminar la conversación, pues ala cuelga y ni me hables más. - Me contestó muy enfadada.

-Puta cabezota...- terminé la conversación y colgué.

Cuando colgué la llamada mis ojos se empezaron a cristalizar y las lágrimas empezaron a recorrer mis mejillas . Veía todo borroso , y mi habitación retumbaba con mis sollozos . Me deprimí pensando que había perdido a mi mejor amiga . Después de un rato me levanté del frío suelo , para acomodarme en mi cama .
Me puse a pensar en el bobo de Ryam cuando éramos pequeños, y se me puso una sonrisa en la cara . Y pensado en me conseguí quedar dormida.

Enamorada De Él Desde PequeñaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora