The "Murderers Psychopaths"

BOYS

Cuando abrí la puerta no lo podía creer, lo que veía era casi imposible, jamás me hubiese imaginado  que a él le pasara algo así.

-Rayos Sam que te ha pasado-grite tomando a Sam del brazo para ayudarlo.

Mi mejor amigo del alma se encontraba en un mal estado, traía varias heridas y una que otras cortadas en el cuerpo.

-¿Quién te ha hecho esto?-pregunte muy alterado.

-E-Eso no i-importa-contesto tartamudeando.

-Le avisare a Frida espera aquí-tome mi teléfono y marque el número de Frida, cuando contesto le conté lo que había pasado a lo que ella contesto que llegaría inmediato.

-No t-tenías porque m-marcarle-dijo Sam.

-Claro que tenía que marcarle, nos preocupamos por ti tonto-conteste ya más tranquilo.

Después de un rato llego Frida, cuando vio a Sam puso la misma cara de preocupación que yo.

-Sam ¿qué te ha pasado?- pregunto Frida muy preocupada.

-Eso no importa-contesto Sam un poco molesto.

-¡Claro que importa idiota, somos tus amigos y nos preocupamos por ti!- grite enojado por lo que decía.

-Está bien les contare, pero no se vayan a reír-dijo serio-Estaba regresando a casa después de ir a ver a mi novia, cuando entre a un callejón vi a dos chicas, muy lindas, se me acercaron y comenzamos a hablar, me deje llevar por su físico, así que cuando me distraje comenzaron a golpearme, luego sacaron sus navajas y pues comenzaron a herirme, luego dijeron algo sobre una jefa y cosas así.

Frida se acercó a Sam y le dio una cachetada muy fuerte.

-Esto es por haberte dejado seducir por dos chicas idiota-dijo ella.

-Las chicas que edad tenían Sam?-pregunte un poco intrigado.

-T-Tenían 13 años-contesto el con un poco de vergüenza.

-No tienes remedio Sam, eres un tonto-contesto Frida.

Fui al baño por el botiquín de primeros auxilios para curar a Sam, después de curarlo prepare la cena para los tres, a pesar de lo que había pasado hoy, ninguno de los tres dejo el apetito de lado.

Luego de eso nos pusimos a ver películas y a contar cosas graciosas o triviales de la vida, después de esto nos fuimos a dormir.

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Han pasado tres semanas desde la golpiza que le dieron a Sam, lo más misterioso es que esas chicas no se habían aparecido otra vez, pero eso no era motivo para bajar la guardia, lo que más me mantenía intrigado era, ¿para quienes trabajan esas chicas?

Lo peor de todo es que Melina no ha conseguido una presa para nosotros, no matar a nadie me desanima demasiado.

Me encontraba en la escuela, la clase de álgebra es un poca aburrida, eso de las ecuaciones lineales no es lo mío, volteo hacia atrás y veo al chico que me gusta, me quedo observando esos hermosos ojos que tiene, hasta que voltea a verme, reacciono rápido y volteo al pizarrón.

Después de esa clase todas las demás fueron innecesarias para mí, a la hora de la salida como siempre Salí después de Sam y Frida, iba caminando hacia mis dos mejores amigos cuando se me acerca un chico a entregarme una nota, abrí la nota y lo que decía sinceramente no me sorprendía, guarde la noto y seguí mi camino.

Hoy fue un día lindo, cuando llegamos a casa, entre los tres nos pusimos a jugar, hubo un momento en el que Sam me estaba haciendo maldad, así que lo acuse con Frida, después de jugar nos pusimos a limpiar la casa, cuando por fin terminamos Sam y Frida estaban muy cansados, en cambio yo tenía mucha energía así que decidí hornear nuestros postres favoritos y de paso hacer Brownies de chocolate para Melina, ya que ella es mi mejor amiga también, fui a la cocina para ver si tenía los ingredientes para empezar a hornear, para mala suerte mía no había ningún ingrediente, tome dinero de nuestro escondite secreto y grite: