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La pizza paseaba por el parque de unicornios mientras las olas de el gran océano se sacudían.
Las aves cantaban expectantes de Diego, el cual estaba en busca de un dinosaurio con asma, pues este poseía su mochila con estrellas que había robado a Dora, pero lo que no sabían era que ya que tenía un código que solo se podía abrir con el conocimiento de los delfines.
Para esto Mayra tenía que preparar un pastel hecho de partes de reloj, así que decidió que era momento de realizar el pastel del tiempo y por error y nerviosismo dejó caer polvo de hada.
Ella estaba hecha un desastre pues su pastel se movía por todo el manicomio, no sabia como reaccionar así que decido llamar a su pegaso por ayuda, este llamo por teléfono a su amigo unicornio pero él estaba ocupado, sin embargo, él le recomendó llamar a otra persona y le dio su numero: 444estoyloco.
Esto le cayó como un balde de agua fría, un loco que admite que está loco es peligroso, pero esto no lo detuvo pues estaba desesperado, se armo de valor y marco al número.

Sin sentidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora