Alexandra

Carta de despedida de José Alejandro.

Las cosas no pueden seguir así, mi vida no puede continuar, el tiempo se ha parado, así que hasta aquí he llegado, me despido de la vida con estos escritos que dejo sobre mi escritorio, mi fiel compañero.
¿Que...porque hize esto? no aré que investiguen, se los diré.
Todo comenzó en mi ultimo semestre de bachillerato, dejé atrás a amigos de anteriores años para enfocarme en mis estudios para salir con buenas calificaciones y conseguir un buen trabajo, todo iba de acuerdo a mi plan, pero no contaba con una cosa, una chica, el tercer día se presentaron los profesores de sus respectivas materias y ahí fue donde la conocí, en cierta clase, mientras llovía en el patio, ya que iba en el turno de la tarde, el profesor nos puso a presentarnos, yo sentado hasta adelante no la noté hasta que fue su turno, al final, ya que se sentó en la misma fila que yo, pero en el ultimo asiento, diciendo sus gustos relacionados con el fut ball y su afición al anime, logro cautivar me haciéndome poner cara de idiota.
A la semana siguiente, olvidando mi objetivo de subir mis calificaciones y olvidar a los amigos, me acerque a conversar con ella, mientras llegaba el profesor, hablamos sobre anime ya que a mi también me gusta, le dije es un gusto conocerte, me llamo José, ella contesto soy Alexandra después solo tuvimos una charla alegre con chistes y risas, además le enseñé a dibujar estilo manga ya que soy bastante bueno dibujando, y así entre dibujos, risas , chistes, manga y anime, me gané su confianza, o eso creí, ya que me dijo "¿Quieres ser mi tomodachi?" respondí que si.
Así que a partir de ese día empezamos a estar todo el tiempo juntos, en clase, a la hora de entrada, a la hora de la salida, incluso la lleve muchas veces a su casa ya que me quedaba de paso hacia la mía, aunque aun tenia que tomar otro microbus, pero en fin, yo creía conocerla, con esa sonrisa que siempre mostraba, pero la verdad era mas cruda de lo que creí, sus padres fallecieron cuando ella tenia dos años y estuvo viviendo con su abuelo, pero este ultimo falleció a la semana siguiente de conocernos, detonando así su verdadera personalidad, distraída, fría, sonriendo por compromiso y para no preocupar a los demás.
Intenté regresar le su felicidad con chistes y hablando de cosas que le ayudaran a olvidar, sin lograrlo, llego un punto en el que ella me dijo "callate y deja me en paz" así que me alejé, aunque no quería, ella seguía con esa actitud, cada día la veía peor, la notaba cada vez mas delgada, cansada e incluso se desmalló una vez en clase de deportes jugando fut ball, así que cierto día hablé con ella, le dije "no me gusta verte así, permite que te ayude" ella sonrió y me mostró su muñeca, vi que tenia varios cortes, de inmediato la tome y le intenté dar un abrazo porque no me acababa de creer lo que hacia, ella me empujo y me dijo que ya no me quería ver jamas, se fue, no la seguí, no terminaba de creerlo, creí ser su amigo pero la verdad no se si esto sea amistad.
A las diez de la noche del mismo día ella me llamó, no contesté ¿por qué? no lo sé ¿me sentía triste por lo que me dijo? ¿berrinche? o quizá yo tampoco quería saber nada de ella, no lo sé, pero no le conteste, al día siguiente quería disculparme con ella por no contestarle, pero no llego ese día, pasaron los días y ella no se presentaba al colegio, me preocupé así que fui a su casa para ver si estaba todo bien además quería regalarle un collar que le compre para pedirle perdón por no saber comprenderla, en fin, toqué cerca de 12 veces, sin respuesta, antes de darme cuenta de que estaba abierto, entré, avisando que iba a pasar, busque por toda la casa sin encontrar a nadie, hasta llegar a la que parecía ser la habitación de Alexandra, abrí la puerta y caí en shock, estaba recostada en su cama con las muñecas rajadas abrasando la foto de su abuelo y sus padres, además de una carta que decía "quien sea" en el sobre, lo abrí ya que yo era el único al que le importaba de verdad, yo era su tomodachi.

Carta de despedida de Daniela Alexandra.

La vida no lo vale, estoy sola en este mundo, sin nadie con quien contar, mi abuelo era la única persona que me daba razones para levantarme y enfrentar un día mas en el mismo colegio, con la misma gente ignorante que solo te busca cuando quieren algo de ti. Solo mi abuelo me ayudaba, ahora que ya no esta, mi vida se desmorona, sé que ni una persona sufrirá por mi así que no se molesten en avisarle a nadie mas, solo quisiera como ultimo deseo que se disculparan por mi de Jose ya que no pude contactarlo, así que no pude arreglar la situación, solo quisiera que le digeran: gracias, por sacarme sonrisas sinceras, por enseñarme a dibujar manga, por no dejarme sola ni una sola vez, ¡Gracias! por todo y perdón ya que la ultima vez que nos vimos lo único que hice fue empujarte y gritar te, no me daba cuenta de que solo querías ayudar, perdón por despedirme así pero es lo mejor, adiós José, mi único tomodachi. (amigo en japones)

Carta de despedida de José Alejandro. (continuación)

Salí de su casa, noté que llovía, esa lluvia me recordó aquella vez que nos conocimos, empecé a llorar y grité con todas mis fuerzas ¡No me dejes solo, no era solo tu amigo, te amaba! después me desmayé, los vecinos me vieron y me fueron a ayudar, lo ultimo que recuerdo son las gotas de lluvia cayendo sobre la nota de Alexandra y el collar que le iba a regalar, mientras lentamente cerraba los ojos.
Desde ese día ya no he sonreído, ya no estudio, solo me meto en peleas para ganar dinero de apuestas para después ir a tomar cuanto pueda con el dinero que gano, esa ha sido mi rutina hasta hoy.
Ya no aguanto esta culpa que me come por dentro, se que si le hubiera contestado esa noche ella seguiría viva, estoy seguro, siento el peso de su muerte sobre mis hombros y la única forma de liberarme es esta, así que mientras escribo me estoy rasgando la muñeca derecha, debo de dar gracias que he terminado de escribir esta carta, así que es mi turno de despedirme.
Adiós mamá y papá, espero que sepan perdonar al estupido de su hijo y digan le a mi hermano Alexis que lo quiero mucho.
Adiós a todos, hoy me encontraré con la única persona de la que me he enamorado verdaderamente, hoy nos veremos Alexan- (En esta parte termina la carta).