𝐃𝐑𝐀𝐁𝐁𝐋𝐄 ; 𝐘𝐀𝐎𝐈

;baby

KarmaGisa.

Esto es la peor vergüenza para el pobre de nagisa, Karma lo había obligado a que se vistiera como una mujer, solamente por qué quería sentir algo de placer y diversión.

El pelirojo optó con un traje rosado, era muy sexy, tenía algunos encajes en la parte del calzón y venía con unas medias que llegaban por el muslo, en la parte de arriba venía completamente destapado.

-Te ves hermoso.
Dijo Karma con voz seductora. -Pero te verías mas hermoso, si mi pene entra en ti...¿No lo creés, nagisa-kun?Karma agarró a Nagisa por las caderas e hizo que se sentará arriba de él, entonces empezó a simular unas fuertes embestidas.

-Karma-kun...Basta.
Decía el ojiazul dando unos gemidos, que para karma eran musica.

Karma con sus dientes empezó a bajarle una media, para después dirigirse al pene del pequeño. El pelirojo acariciaba el pene de aquel chico. Karma lamía y daba unas pequeñas mordidas no muy fuertes, nagisa se tapaba sus ojos con sus manitas, le daba pena. Karma se separó de aquel miembro, retiro las manos de nagisa y lo empezó a besar, introdujo su lengua en la boca de nagisa.

"No me beses, tu boca huele fea".

"Amor, ese es el sabor del pene".

Nagisa se quedo perplejo, tan mal sabía esa cosa.

La habitación se estaba hundiéndose por los gemidos que aquellos dos chicos emitían, Karma no era tranquilo, ni tenía compasión por nagisa, el era rudo, sus embestidas cada vez iban más fuertes, y más, y cada vez más fuerte. Nagisa ya no daba por más.

Karma no tenía control.

"¡Eres solo mío, bebe".
Decía Karma, mientras seguía dando sus embestidas.

Oh, les traje este delicioso lemon.
No sé si me salió bien, pero espero que lo disfruten.