Episodio 6 - Atelier de Machine Dragons y Exámenes de Admisión.

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Parte 1

Castillo de la Capital Imperial. En el salón de una pequeña mansión en las afueras, Lux y un invitado estaban sentados.

Abril, cinco años atrás.

El señor feudal de la región del noreste de la Capital Imperial, el conde Atismata reunió la resistencia de cada lugar e inicio un levantamiento 20 días después.

Junto con el apoyo de los países vecinos, estaba listo para liderar un ejército de 70.000 soldados y 207 Drag-Knights y decidió invadir la Capital Imperial.

Para transmitir esta información muy importante y altamente clasificada, Fugil vino.

Fue exactamente diez días antes de su hermana menor Airi fuera llevada hacia el Condado Frontier.

Fugil, que estaba ajustadamente envuelto en una bata de pies a cabeza, se sentó en un asiento en la mesa iluminada por la llama de una vela, y levantó un poco la cabeza.

-El asunto está avanzando según lo planeado, hermanide - Como lo planeado, todo va bien.

-Gracias.

Lux hizo una reverencia y luego puso la Sword Device que llevaba en la mesa.

-Yo también estoy listo.

-Como era de esperar de ti, hermano menor.

Fugil que escucho eso, asintió con admiración.

-Has superado con creces mis expectativas. Al ser el usuario más joven de la historia, mostraste tu capacidad mediante la obtención de varios cientos de victorias en los entrenamientos y simulacros de batallas del Ejército del Imperio. Originalmente, esa hazaña sin precedentes es algo que debería ser alabada en todo el país y también por el emperador... pero este Imperio terminó estando corrompido a la raíz.

Con una voz mezclada con resignación, continuó aún más.

-Tú eres el Ilegítimo Príncipe Séptimo. Además, eres una persona que se opuso a la política del Imperio. No importa la cantidad de habilidad que tengas - incluso si eres elogiado por tus logros, tienes una opinión diferente la cual es de no atraer la atención hacia la legitimidad de tu sangre. Esto significa que una persona no puede ser un "Héroe".

-Nunca he pensado en establecer a mí mismo como un héroe. Solo...

-Lo sé.

A la calma respuesta de Lux, Fugil sonrió.

-Pero, te preguntare una vez más ¿No deberías dejar de esa manera de luchar? No tienes ponerte en peligro expresamente para salvar al enemigo. Si lo quisieras, aunque habrá sacrificios, puedes elegir una forma más segura...

Ni siquiera sacudido por la voz de Fugil que lo invitó, Lux levantó su cara.

-De esta manera, aun suponiendo que el plan tenga éxito, no habría ningún sentido.

-La mayoría de los hombres del ejército son títeres de la familia imperial. Mientras empuñan el arma absoluta que es el Drag-Ride, que obedecerían ciegamente las órdenes de opresión y masacrarían a gente inocente. Así, no se puede afirmar que ellos no tienen ninguna responsabilidad.

-Pero, puede ser que solo se vieron obligados a ejecutar órdenes que ellos no querían. Incluso la gente del ejército tiene familia.

-Uf... Caray, tu determinación merece gran admiración

Fugil, un tanto sorprendido, sonrió con ironía y luego se puso de pie.

-Bueno, entonces, nos vemos en tres días. De acuerdo con tus instrucciones, vendré aquí de nuevo. Hasta entonces, dame una respuesta definitiva. Si cooperarás con un <Wyvern> y luchar junto a mi <Bahamut> O...

Saijaku Muhai no BahamutDonde viven las historias. Descúbrelo ahora