ILÍCITO

#3

Nuevamente caía en el abismo...

Lentamente creaba su suicidio...

Se puso de rodillas ante el altar, ante la imponente Cruz Santa.

Pidiendo la misericordia y el perdón.

Confesando con cada gota el pecado capital que había cometido.

Sabía que no era su culpa... mas sabía también que el perdón fácil no era obtener.

El fuego quemaba su alma y no
había frío que logrará salvarle.

Simplemente... No podía.

El olvido sería su muerte... Y aquel recuerdo de lujuria, se Sernia sobre sí como colores de Marfil.

Maldad.

Dolor.

Muerte.

Obsesión.

Lujuria.

Pecados.

Castigo.

Dios...

Necesitamos,

Nada... No hay par... No hay fe...
Ya no hay Dios.

Necesitamos,

Todo... Somos una vida materialista... somos una vida de dinero... somos nada.

Eres la nada... eres el algo.

Eres creación... eres carne.

Eres pecado... eres amor.

Tierra de imperios.

Tierra de muerte.

Tierra de sangre.

Tierra muerta, tierra de paz.

Agarra la cuerda que tus pecados crearon y ponla en marcha ya.

Creaste tu suicidio.

Hora de acabar.

Hora de morir, así que termina de pecar y muere al fín.

Dios no perdona.

En el infinito a vagar.

No se necesita fe.

Se necesita dignidad... se necesita dinero.

Olvida la educación.

Que es hora de morir.