Escuché la puerta del gimnasio abrirse y ahí estabas tú, con la respiración agitada y calado hasta los huesos por el fuerte diluvio.
Observaste todo el lugar con una clara expresión de confusión al encontrarlo vacío a excepción de mí, que estaba con un balón en la mano practicando mis pases.
"¿Dónde están todos?", me preguntaste ladeando un poco la cabeza, haciendo que gotitas de agua cayeran desde tu anaranjada cabellera al suelo.
"Hoy no hay práctica por la lluvia, es muy fuerte." Respondí.
"¿Y qué haces tú aquí?"
"Imaginé que vendrías como el tonto que eres y me quedé para avisarte cuando llegaras."
Silencio. Solo se escuchaba el ruido que provocaba la lluvia al caer sobre el suelo. Te miré de reojo como siempre hacía, observando con detención tu cuerpo. Tenía que admitirlo. Ese pequeño cuerpo tuyo, tus ojos marrones y tu pelo tan naranja como la fruta me volvían loco. Para mí, tú eras como un sol y adoraba eso. Sabía muy bien que tú no tenías la misma opinión de mí como yo la tenía de ti, así que me conformaba con solo anhelarte y tenerte en mis sueños.
Vi como sacabas tu ropa de cambio de la mochila, empezando a cambiarte frente a mí. "¿Esto es alguna clase de prueba, Dios?", pensé totalmente embelesado observando todo tu cuerpo con detalle. Cuando me miraste, yo desvié la vista a otra parte, notando como mis mejillas comenzaban a tomar calor. Temía que me descubrieras, que me repudiaras por darte una mirada tan lasciva.
Esperando a que rompieras el silencio que comenzaba a tornarse incómodo, empecé a darle vueltas al balón como método de distracción.
De repente, noté unos delgados brazos que me rodeaban. "Tengo frío, Kageyama", dijiste apoyando tu mejilla en mi espalda. Mis latidos se aceleraban y llegó un momento en el que no podía diferenciar si eran tuyos o míos, ya que notaba que tu corazón también latía con fuerza y velocidad.
Solté el balón y apoyé mis brazos sobre los tuyos con una suave sonrisa. Cerré mis ojos, disfrutando de aquel momento tan anhelado y susurré:
"Así son los días lluviosos, Hinata... Fríos."
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Rainy Day
FanfictionUn silencioso pabellón en un día de lluvia. "Así son los días lluviosos, Hinata... Fríos." ...No me quería calentar la cabeza. Lo siento.