El laberinto

Capítulo 3

Cuando salí del edificios un montón de chicos se me quedaron mirando embobados, ¿qué les pasaba a esos chicos? ¿Nunca habían visto a una chica?
-Eres la única chica aquí-dijo Minho con mucha naturalidad.
-¿Que?-pregunté un poco confundida no podía ser, es ¿imposible?
-Como lo oyes eres la primera chica que vemos aquí y que recordamos.
-¿Que recordáis?-pregunté asombrada.
-Nadie recuerda nada cuando llega, ¿no lo has notado? O ¿recuerdas algo?-preguntó
-No...no ahora que lo dices no, no recuerdo nada.-No me había parado a pensar en eso.
-Pues eso. Ah y te tenemos que buscar con quien dormir ya que no dormirás con los demás chicos, quien sabe lo que podría pasar.
-De... ¿Acuerdo?-dije, en realidad tenía razón, pero ¿con quién dormiría?
Entramos en un pequeño cobertizo y para mi gran sorpresa había más chicos mirándome.
-Parece que te has hecho muy popular por aquí estos tres días, todo el mundo habla de tía y todos tienen razón eres muy guapa la verdad-dijo un chico de piel oscura sonriéndome.
-Cállate Fritanga.- dijo Minho con una sonrisa en el rostro, en verdad me gustaba su sonrisa.
-No pasa nada, para mi es todo un alago, ¿sabes?-dije sonriendo. Y todos nos reímos.
En ese momento apareció Alby y nos dijo que nos sentáramos.
Nos sentamos en una mesa en la que no había nadie y empezamos a comer, en ese momento apareció el "mejor" chico de todo el lugar, Newt.
-Alby, Minho.-dijo y pasó de mi, como si yo no estuviera.
-Hola a ti también Newt.-Dije con una sonrisa y pude ver que se puso furioso y en cierto modo me divirtió.
-Bueno yo me voy que aquí hay demasiada tensión.-dijo Minho, estaba por levantarse pero le estiré del brazo y le senté de nuevo y le dije:
-No, no hace falta que te vayas, ¿verdad Newt?-dije maliciosamente.
-Verdad-dijo mirándome con rabia.
-Bueno vale, pero igualmente tengo que irme a correr.-dijo Minho.
-¿A correr a donde?-pregunté.
-Al laberinto.-dijo él como si fuera lo más obvio del mundo.
-¿Que laberinto?
-Lo verás mañana.-Dijo Newt.
-¿Por qué mañana?
-Porque mañana empiezas las pruebas para saber que se te da mejor.-dijo con brusquedad.
-De acuerdo, pero no hacía falta que me lo digas de esta manera, ¿vale?-me levanté y me fui corriendo, no se donde pero me fui.