– ¿Celia? Puedo pasar – suspiro, es mi hermana Zoey.
– Siiiiiiiii – la grito desde dentro de mi habitación.
Entra y corriendo se sienta en la cama al lado mío mirándome con una sonrisa de oreja a oreja.
– Veras.... es que no se que ponerme, ¿Podríamos prepararnos juntas? – la verdad es que yo tampoco sabía que hacer, dudaba si tenía un vestido.
– Claro – le hago una pequeña sonrisa, ella pega un saltito y se va corriendo a por todos sus vestido y su maquillaje ya que yo no tenía nada.
Pasan unos minutos y aparece mi hermana con unos 10 vestidos, y tres neceseres llenos de maquillaje y esos potingues.
Empieza a probarse vestidos, normal que no sepa cual ponerse todos le quedan de miedo, ya ibamos por el octavo? o noveno no lo se.
De repente aparece mi hermana con un precioso vestido azul oscuro, que le queda por encima de la rodilla, con un poco de escote pero sin pasarse, de tirantes y con un poco de vuelo. Le quedaba precioso ademas conjuntaba con sus ojos, los que me miraban en busca de mi opinión.
– ¡Sin ninguna duda, este! – la doy un abrazo, ella empieza a saltar como una niña pequeña.
La ayudo a ponerse unas sandalias negras con tacón, y le presto un collar que me regalo nuestra abuela, nunca lo había usado, ya que esta iba ser mi primera fiesta.
– Me encanta, y tu Celia que te vas a poner – apunto mi mirada hacia mi armario haciéndola ver que no tengo nada, al segundo me entiende y se va corriendo sin decir nada.
Vuelve a aparecer por mi habitación pero esta vez con un vestido, de color rojo, también de tirantes pero este era ajustado por todos lados, era muy bonito pero no creo que eso me quedara bien y no era de mi estilo.
Me quedo mirándola, ella me lo lanza.
– ¿A que esperas? ¡Pruébatelo! – y me empuja hacia el baño.
Me quito el pijama y me lo pongo, me da miedo mirarme al espejo así que salgo directamente para que mi hermana me diga que tal.
Ella se gira, abre los ojos cómo platos y se tapa la boca, se acerca corriendo hasta mi, me impide mirarme en el espejo, eso era una mala señal.
- Espera, todavía no estas lista – es lo único que me dice, hago amago de hablar pero me tapa la boca y me hace una señal para que me tranquilice.
Empieza a maquillarme, después me suelta el pelo de mi despeinado moño, empieza a cepillármelo.
– Me encanta tu pelo, el mío es completamente liso – dice con cierta tristeza, la verdad mi pelo es muy peculiar, es liso excepto las puntas que es donde se forman unos pequeños tirabuzones. – Te lo voy a alisar completamente.
Los minutos se hacen eternos, cuando termina, me pone unos pendientes de aro plateados, un pequeño collar con mi inicial y unos tacones negros, la miro con miedo nunca he llevado, esta noche podría caerme.
– Ya puedes mirarte – me ayuda a lenvantarme y me lleva hasta el espejo.
Es increíble, parecía un vestido echo a medida para mi, no parecía yo, mi hermana me habia puesto un maquillaje sencillo pero precioso gracias al rimmel mis pestañas eran tres veces mas largas y mis labios rojos conjuntaban con el vestido. Mi melena rubia parecía mucho mas larga.
– Ese vestido iba ser por tu cumpleaños, pero quería que fueras preciosa a tu primera fiesta – me giro y la abrazo, a pesar de todo nos queremos – ¡Ademas no quería manchar mi reputación llendo con mi hermana pringada!
La dio un pequeño puñetazo en el brazo, pierdo el equilibrio por los tacones y me caigo de culo al suelo.
Zoey empieza a reírse al principio me hago la enfada, no aguanto mas y empiezo también a reírme.
Se oye un pitido de que a llegado un mensaje, mi hermana mira su movil y lee el mensaje en alto:
" Recordar la fiesta es a las 21:30 en casa de Ryan, traerá a un invitado muy especial"
Nos miramos las dos confusas y curiosas deseando saber a quien nos íbamos a encontrar esta noche, pero ninguna de las dos nos podíamos imaginar la de cosas que iban a cambiar en esta larga noche.
