Estaba demasiado aburrido descansando en el sofá de la sala de estar mientras observaba a willy cocinar.
Este se paseaba de una punta a otra bailando a saber que canción con los cascos puestos y en realidad no tenía ganas de molestarlo, se veía muy animado, así que hice lo mismo y entre a youtube.
Escuchaba canciones aleatorias hasta que entre las recomendaciones vi una canción de Rihanna, la había escuchado antes y daba muchas ganas de bailar, pero no había visto el vídeo así que eso hice. Era muy subido de tono y la tía se refregaba sin problema alguno con el tío que estaba con ella ahí, en realidad no me había causado efecto alguno, pero lo que si lo hizo fue el haberme imaginado a willy bailando como ella. Porque aunque muchos crean que de los dos yo soy el mejor bailarín pocos sabían que mi pequeño hacia maravillas moviendo las caderas.
No resistí más y poniendo la cancion en altavoz desde mi movil me acerqué sigilosamente a mi compañero pasando una mano por su cintura alertándolo por lo que pegó un pequeño salto antes de quitarse los cascos y preguntar qué sucedía.-¿Quieres bailar cariño?- pregunté en su oído con un tono que sabía que no iba a rechazar
Notó cual era la canción y por su accionar también descubrió al instante cuales eran mis intenciones, así que dejando lo que estaba haciendo antes se dio la vuelta pasando sus brazos por mi cuello comenzando un vaivén lento hacia los costados con sus caderas el cual seguí descansando mis manos en su pequeña cintura y mi cabeza en su cuello aspirando ese aroma que tanto me encantaba.
Pasamos un largo tiempo así, tanto que se habia acabado la canción y ni lo habíamos notado hasta que Willy se separó de mi acercándose a mi móvil presionando el botón de repeat volviendo a acercarse con movimientos más intensos y una sonrisa divertida hacia donde me encontraba.
Me tenía completamente hipnotizado y no podía ni quería dejar de mirarlo.
Se paró a una distancia demasiado lejana para mi gusto dandome la espalda y agachándose un poco volvió a bailar como antes mientras se acercaba demasiado lento hacia mi.
Me acerqué rápidamente hacia el tomándolo de nuevo por la cintura y pegándolo a mi cuerpo acompañando sus movimientos.
-Joder chiqui- susurré en su oído en el momento en el que descaradamente comenzó a rozar mi entrepierna, es que Rihanna perdería contra el en un concurso de baile.
No resistí y comencé a besar su cuello y bajar cada vez mis manos a lo que mi compañero respondió con un pequeño gemido que no pudo reprimir.
Lo giré bruscamente buscando sus labios con desesperación y los uní con pasión, lo deseaba demasiado. Colé una mano bajo su camiseta que luego de separarnos a regañadientes logré quitar. Mi otra mano fue directamente a su trasero dando un apretón. Esa fue la gota que rebalsó el vaso porque de un momento a otro ya nos encontrábamos en la habitación teniendo uno de los mejores orgasmos de nuestra vida.
- Igual te invito a bailar así más seguido niño- Susurré en su oído para después darle un pequeño beso en el cuello a lo que me respondió con una sonrisa dándome la espalda para que lo abrace y así al fin poder descansar