Cartas

karma

Cuánta empatía decimos tener cuando esperemos de otros algo que nosotros mismos no podemos, y muchas veces, no queremos dar?
Cuántas veces pedimos exclusividad o ser los primeros en la vida de alguien cuando ellos no lo son para nosotros?
Más de una vez hemos estado en esa situación en dónde 'si yo lo hago está bien, si me lo hace el otro está mal' siendo totalmente hipócritas al pedir algo que no estamos dispuestos a dar
No vamos a negar que se siente súper mal cuando vemos lo que nos hacen y el famoso 'karma' nos baila por el frente y no nos queda más que soportarlo y sobrellevarlo porque no olvidemos que recibimos lo que damos tanto a las personas como al destino.
En distintas ocasiones nos creemos más inteligentes, capaces y hasta fingimos una cierta superación cuando en realidad no quemamos y vamos muriendo de apoco por dentro por nada más y nada menos que el famosísimo orgullo que nos obliga a tragarnos todo eso que no podemos decir porque al fin y al cabo, también lo hemos hecho y nuevamente no podemos reclamar nada
Cerrar los ojos, respirar suave y fingir que nada pasa, se vuelve habitual en algunos momentos como estos, tal vez puedas buscar un cierto consuelo en saber de qué por lo menos hacer ese dichoso mal, nos hace sentir 'llenos' aunque sabemos muy en el fondo que es otro vacío más que por más que intentemos, nunca se va a llenar y menos cuando le fallas a alguien que no lo merecía y talvez si valía la pena.
En algunos momentos creemos que esa otra persona no sería capaz de hacer lo mismo que le hacemos, pero no contamos con ese pequeño momento en que nos olvidamos de que al final del día todos somos humanos, tenemos necesidades y buscamos satisfacerlas en dónde ya no recibimos ese calor y entonces.. que queda? Seguir soportando el no poder decir nada porque sería mentirnos moralmente o alejarse de todo e intentar hacer las cosas bien de una vez por todas, sin lastimar a nadie ni molestar al que tenemos al lado? La respuesta es tan obvia y justamente es por eso que nos cuesta más movernos aa un lado del camino y continuar con nuestra vida que seguir comiendonos la cabeza con un supuestamente remordimiento mezclado con el enojo de no poder exigir algo que no querés dar